Marini, de Barrios de Pie de La Plata dijo que "la cosa no da para más" y pidió a Macri "que reflexione"

Marini, de Barrios de Pie de La Plata dijo que

La jornada de hoy puede ser un punto de inflexión que la gestión de Cambiemos debe mirar con detenimiento. Organizaciones que hace meses no tenían ningún grado de coordinación fueron capaces de impulsar una multitudinaria movilización que atravesó la Capital Federal desde Liniers (salió de San Cayetano) hasta Plaza de Mayo. Hubo sectores ligados a la economía popular, desocupados, comunidades cristianas de base y referentes sociales de diversas extracciones. Macri unió lo que parecía imposible. La Iglesia jugó un rol fundamental.

“Fue un gran acto de unidad, empujado desde abajo”, sintetizó Lalo Vallejos, presidente del club 25 de Mayo, de Ensenada, y miembro de Octubres.

La jornada comenzó muy temprano, casi al alba. La iglesia de San Cayetano fue el centro que concitó la atención de los medios de prensa nacionales e internacionales. Una carta del Papa Francisco que citamos en nota aparte expresaba el marco de lo que se estaba poniendo en debate sin evidente panfleto : “Querido Arancedo: que en esta fiesta de San Cayetano todos los Obispos sepamos acompañar a nuestros hermanos que piden pan y trabajo. Y lo hagamos con cariño, cercanía y oración, y pidamos también para nosotros esa gracia: que nunca nos falte trabajo, ese trabajo al que nos envía el Señor y que nos confiere dignidad”.

Vallejos relató a Blanco sobre Negro cómo vivió el inicio de la movilización: “Adelante marchaban los grupos eclesiales con figuras de la Virgen María, del Padre Mugica y de Jesús, atrás iban los dirigentes gremiales, sociales y de la CGT, de las dos CTAs, y del resto de las entidades que convocaron . Las primeras diez cuadras fueron muy emotivas, la gente se mezclaba y cruzaba los bordes de las columnas para saludarse, había mucha emoción”.

Mariano Marini, referente de Barrios de Pie en La Plata, dijo a Blanco sobre Negro que “fue una jornada muy buena, que deja un balance muy positivo. Había una cantidad inmensa de gente, de distintos sectores, de trabajadores informales, pero también de sindicatos, gente suelta, familias, todas expresando que la cosa no da para más, que la realidad económica es cada día más dura, que el gobierno toma medidas sólo a favor de los grupos más concentrados de la economía, y no para los trabajadores y los más humildes. Fue una jornada contundente que tiene que llamar a la reflexión al gobierno”, añadió Marini.

Hipólito Madariaga, de la CTEP, es agricultor y vecino platense. Realiza su trabajo en el cordón frutihortícola, un sector muy castigado, en emergencia. No obstante la protesta renovó sus esperanzas de que la situación pueda cambiar. “Sentimos alegría porque vemos que con diferentes banderas marchamos por un reclamo justo, necesario para el pueblo entero”, confesó, y agregó: “Hoy hicimos un largo camino los que estamos en diferentes sectores productivos, en diferentes organizaciones, había muchísima gente, no solo de La Plata, sino de todo el país, así que estamos muy contentos”.

“Estamos sufriendo seriamente las políticas de Macri y fue una forma de decirle que frene la transferencia de los que menos tienen hacia los más poderosos”, destacó Madariaga, y relató cómo es la situación de su sector: “Hay muchos compañeros que están al borde de cerrar, y venderlo todo, porque la suba de los alquileres y los insumos hace muy complicado seguir produciendo”.

La inmensa y plural movilización será tema de debate cada vez que se quiera mensurar el impacto de la política económica sobre el tejido social (si es que cesa un rato el regodeo por la difusión de videosocupapantallas aportados por agentes de la ex SIDE) . Y hay que recordar que todavía no se hizo sentir el tarifazo, “retenido” por el momento merced a una telaraña de medidas judiciales.

“Yo creo que este es el camino, apostamos a esto y lo expresamos hoy en el acto. Con muchos sectores venimos dialogando, hay que estar a la altura de las circunstancias y consolidar este marco de unidad, de espacios sociales y políticos de distinta procedencia y con distintas metodologías de acumulación política. Las diferencias no implican que no podamos movilizarnos juntos para mejorar la situación de nuestros compañeros y de todos los argentinos. Yo creo que si el gobierno no reflexiona, este marco de alianzas se va a mantener y puede ser mucho más amplio en el futuro”, opinó Marini, el referente platense de Barrios de Pie en un comentario con una mirada de mediano plazo.

Vallejos, del Club 25 de Mayo lo dijo a su manera: "Hoy pudimos expresar diversidad y unidad para frenar la política del hambre, que fue el centro de la movilización. Las tres “T” del Papa fueron lo principal de la marcha, esa pluralidad muestra que se puede pensar en una unidad que abrace al 95 por ciento de los argentinos".

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