Lasi se sentó en el banquillo y comenzó su declaración diciendo que trabajaba como jardinero por las tardes en una casa ubicada enfrente a la suya, y que el 15 de julio decidió faltar e ir a cazar palomas hacia a El Mirador. Para ello sacó el arma de su papá, llenó una botella de agua y salió hacia el lugar.

Sostuvo que en el trayecto se encontró con los otros dos imputados, Daniel Vilte y Santos Clemente Vera, empezaron a charlar, uno de ellos le preguntó si seguía trabajando en Turismo, le dijo que sí, caminaron unos metros y antes de llegar a El Mirador, vieron a dos chicas que parecían ser turistas.

Contó que Vilte y Vera quisieron robarles el bolso, vio forcejeo, uno de ellos sacó la pistola, les apuntó y amenazó. Luego se fueron hacia un sendero ubicado a la izquierda de donde hay un tacho de residuos. Minutos después escuchó gritos, lo llamaron, le dijeron “Gauchito (apodo) vení”, él se acercó, las vio arrodilladas con los pantalones a la altura de sus rodillas. Eran las 17:30 del 15 de julio.

Lasi relató que Vera le pidió su arma pero él se negó a dársela y dijo “estuve en el lugar unos 10 o 15 minutos, no sé si viendo o asustado si vendría alguien, o mi papá, en ese momento hubo cambio de armas, Vera agarró la mía, me pidió que la ponga en mi mochila, lo hice.”.

El imputado declaró que participó del abuso sexual a las turistas francesas aunque aclaró que solo fue con una de ellas pero no recordó con cual, también destacó que las chicas no estaban golpeadas ni con la ropa rasgada. Textualmente dijo “tuve un descontrol, no sé qué me pasó, después volví en sí, dije ¿qué estoy haciendo?”.

Manifestó que en ese momento decidió irse a su casa, los dejó a Vilte y Vera en el lugar, agarró su mochila y bajó de El Mirador. Cuando llegó, abrió el bolso, vio un celular, una cámara y un monedero con 200 pesos, probó el celular y le puso su chip.

Expresó “agarré mi moto y me fui a mi otra casa con mis hermanas, a la noche volví a mi casa otra vez, deben haber sido como las 9, media hora después Vilte y Vera vinieron a verme para entregarme el arma. Me enojé con ellos, les pregunté ¿por qué hicimos esto y qué pasó después?. Me dijeron que después no paso nada. Les dije tomen el bolso, llévense todo esto, no quiero nada. Le di el bolso había un monedero y un buzo. Les comenté que probé el chip en ese teléfono, me dijeron que me quede con el celular y la cámara”.

El imputado también habló de su novia, Fernanda Cañizares y dijo que la fue a visitar, le mostró el celular y le mintió que se lo había comprado a un compañero, luego de dos días se lo regaló. Con respecto a la cámara le dijo que la encontró en una pizzería.

Afirmó que el 30 de julio llamaron a declarar a su papá, Walter Lasi, quien le había comentado que el día anterior habían encontrado a dos chicas muertas, dijo que su papá estaba asustado porque la Policía iba a allanar las casas de San Lorenzo y ellos tenían un arma.

Dos días después, Walter Lasi le contó que para no quedar implicado, le dio el arma a Pajarito Ramos para que la guarde, sostuvo “mi papá nunca supo del hecho, yo nunca comenté nada con él, eso fue hasta que nos detuvieron”.