El gobernador Gildo Insfrán resaltó la acción colectiva que percibe en todos los sectores de Misión Tacaaglé que le han permitido evolucionar en el plano social y económico y sobre todo la determinación de recrear la identidad común sustentada en los pueblos originarios, en la pléyade franciscana que se asentó allí en 1901 y las corrientes migratorias que con los criollos fueron afirmando la convivencia desde la diversidad.

El mandatario se mostró “complacido de participar de una jornada festiva en la que la movilización popular otorgó a los festejos un clima diferente y optimista que le hace confiar en que los tiempos que vienen serán más constructivos aun al reconocer se aprecia que existe una identificación colectiva en la aceptación de la gestión pública y en el anhelo de seguir transitando los mismos ideales que entusiasman, inclusive, a las nuevas generaciones de tacaaglenses”.

Esa integración comunitaria quedó reflejada en el homenaje del pueblo a los fundadores y a las familias pioneras pero también a las distintas comunidades originarias que habitaron y habitan la zona y que se sumaron al desfile del que participaron representantes de todos los sectores, observándose la existencia de una juventud activa que ha encontrado en el deporte y la educación –ya que allí funcionan establecimientos desde el nivel inicial hasta el terciario– el modo de canalizar sus inquietudes y ansias de superación.

La presencia de una feria en el polideportivo municipal con producciones diversas, incluso reproductores de cabañas locales que a través de una favorable operatoria diseñada por el estado llega a manos de los pequeños productores locales, además de maquinaria e implementos agrícolas, la de los técnicos y personal del CEDEVA que es considerado el enclave tecnológico puesto al servicio del mejoramiento cualitativo de la producción frutihortícola que acrecentó el interés juvenil por las carreras agrotécnicas, así como de las agrupaciones gauchas lugareñas y de General Belgrano que fortalecen las inquietudes por la afirmación de la impronta de la cultura propia.

El primer mandatario que estuvo junto al jefe de Gabinete, Antonio Ferreira; el jefe comunal lugareño, Víctor Leguizamón; además de legisladores nacionales, provinciales, concejales e intendentes de casi una decena de poblaciones, disfrutó de una colorido y jubiloso desfile cívico-militar, para luego recorrer una atractiva feria donde colegios, productores y asociaciones civiles mostraron sus trabajos y producciones. También compartió con pequeños productores el momento en que estos accedían a reproductores de cabañas en condiciones muy beneficiosas a través de un plan diseñado por el estado.

Prontamente el doctor Insfrán disfrutó de un multitudinario almuerzo popular en el mismo predio donde hace más de un siglo los franciscanos daban los primeros pasos de la hoy progresista Tacaaglé, donde conversó largamente con viejos conocidos y con hijos y nietos de destacados pobladores de la zona, con quienes memoró anécdotas y hechos expresivos de la región.

Lugareños

Una de las sentidas reflexiones en la celebración la dio Néstor Rodríguez, hijo de la primera maestra del pueblo, doña Pina, evocando las vivencias llenas de penurias y necesidades pero también de grandes alegrías al alcanzar el objetivo de encontrar el asentamiento donde se iniciaría la misión franciscana.

Evocó las “historias de mis padres, de esfuerzos, sacrificios, solidaridad, fe y trabajo”, y a modo de ejemplo memoró cuando en el año 1953 para sacar la cosecha de algodón necesitaron 30 con bueyes para llegar hasta Clorinda y así vender el producto; “fue una de las caravanas más grandes que se recuerde y esa era la vida del agricultor y de las personas que vivían aquí”.

Destacó que tuvo que pasar más de medio siglo años para que el sueño de progreso de nuestros antepasados viera sus frutos por la aparición política a nivel nacional del señor ex presidente Néstor Kirchner, un visionario, la continuidad de la presidenta Cristina Fernández, con la entereza y valentía de la mujer argentina, y la conducción y liderazgo provincial del doctor Gildo Insfrán, hace que hoy nos encontremos con esta realidad de rutas asfaltadas, tendido eléctrico, fibra óptica, modernos edificios escolares y centros de salud, obras de agua potable y el apoyo permanente a todos los que de alguna manera siguen apostando a la producción y al trabajo, a la búsqueda del progreso personal y, por supuesto, de la tierra natal.

“Los tacaaglenses debemos ser agradecidos y sentirnos orgullosos de ser hoy un pueblo privilegiado de la Argentina y de Formosa, porque tenemos un legado histórico único, un legado que solo un pueblo elegido tiene, una historia rica, mezcla de gringo y de la sangre paraguaya, surgida de la fe, del trabajo”, enfatizó.

El intendente de Tacaaglé, Víctor Hugo Leguizamón, destacó que la localidad “hoy se levanta altiva y pujante, progresista y luchadora”, para agradecer a “hombres y mujeres pioneros de nuestra historia, quienes han forjado y sembrado la semilla fundando a nuestro pueblo en aquel 1901, como ser la familia Lotto, León, Ovelar, González, Celía, Espínola, entre tantos otros, y a quien en vida fuera la primera maestra, la recordada doña Pila”.

“En un nuevo aniversario de nuestro pueblo, quiero agradecer profundamente a nuestro gobernador, Gildo Insfrán, el gran hacedor de nuestra nueva historia”, afirmó, reconociendo a los “vecinos, porque hemos puesto la unidad y el pensamiento en acción en beneficio de todos, y estamos concretando en el transcurso de todos los días con hechos que están a la vista”.

“Nuestra filosofía de trabajo será la que venimos marcando desde hace tiempo atrás, que es trabajar por el bienestar y la inclusión social, cubriendo los distintos aspectos comunitarios, ese quehacer es el que nos marca el contexto con el que nos desenvolvemos para que con criterio busquemos los medios a fin de cubrir las necesidades de los vecinos y así todos los días podamos avanzar. Tenemos mucho por delante y estoy seguro que lo haremos junto a nuestro conductor, el gobernador Gildo Insfrán”, enfatizó.