Neuquén > A modo de balance, el candidato a senador por el Frente para la Victoria (FpV), Marcelo Fuentes, señaló ayer que la campaña electoral “fue pobre de argumentos”. Negó las acusaciones de su rival del MPN, Guillermo Pereyra, por los supuestos afiches falsos y consideró que “es grave terminar el último día con la discusión de quién pegó o no un cartel”. No obstante, afirmó que percibe “un clima favorable” para que el kirchnerismo se asegure al menos una banca en cada cámara del Congreso.
En diálogo con periodistas, cuestionó con énfasis a Pereyra, al que señaló como el representante del “anti-kirchnerismo” en Neuquén y reiteró que “es evidente que formó parte de una estrategia del grupo multinacional Repsol” contra la consolidación de la YPF estatal.
También apuntó sus dardos hacia el intendente capitalino Horacio Quiroga, cara visible de la campaña de Compromiso Cívico Neuquino (CCN). Estimó que las afirmaciones del jefe comunal sobre la posibilidad de que Neuquén defina la mayoría del FPV en el Senado implica “otro manotazo de ahogado”, al igual que su estrategia de plantear al electorado que la alternativa pasa por el kirchnerismo o el candidato quiroguista Marcelo Inaudi.
“Son vergonzosos los carteles usando mi apellido por parte de otro partido, donde dicen que es Inaudi o Fuentes, pero me pone contento porque tengo otro nuevo jefe de campaña, que es Quiroga, y porque me hace acordar a la frase Braden o Perón”, ironizó.
Sobre las expectativas para el domingo, dijo que respecto de las PASO “percibimos un cambio de actitud y de clima, con una recepción muy favorable para nuestra propuesta”, por lo que da por descontado que disputarán las bancas en juego con el MPN.
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