Al anochecer, puede verse a simple vista una “ocultación” de Venus por la Luna y la posterior “reaparición” del famoso y brillantísimo “lucero”, que se apaga y se enciende lentamente en el cielo a medida que se mueva el satélite natural.

El extraño eclipse se ve en casi toda la Argentina, salvo en la región Norte.

A simple vista o con binoculares, puede verse apagar al planeta como si se fuera una lamparita.

Poco después ocurre la segunda parte del fenómeno, cuando Venus reaparezca por el borde iluminado de la Luna.

A medida que asoma por el limbo lunar, el “lucero” se enciende nuevamente en el cielo, durante medio minuto, y muy lentamente, ambos astros se irán separando dando lugar a una vista inolvidable.