La Asociación de Diseñadores Gráficos de la Costa Atlántica advirtió su preocupación e incertidumbre ante la presentación de un proyecto de ley que busca la colegiatura para diseñadores en Comunicación Visual. Es que, aunque el espíritu de la iniciativa elaborada por el senador Gervasio Bozzano es defender la profesión de diseñadores gráficos y en comunicación visual, la entidad que agrupa a los profesionales consideran sólo los perjudicaría. 

En concreto, rechazan una serie de artículos que prevé que sólo se podrán matricular diseñadores con título universitario, lo que impediría trabajar a quienes tengan título terciario, “sumiéndolos en un marco de ilegalidad, por fuera de la eventual colegiatura”. Según el texto, se aplicarían sanciones a quienes realizaran trabajos de diseño sin estar matriculados en el colegio. 

Uno de los principales argumentos del rechazo a la iniciativa consiste en que en toda la provincia de Buenos Aires existen 25 escuelas de artes visuales públicas, de las cuales 17 brindan educación superior terciaria. Incluso, en algunas de estas instituciones, la carrera de Diseño gráfico representa aproximadamente la mitad de su matrícula de alumnos y de la proyección local de su oferta académica.

En este marco, la Asociación de Diseñadores subrayó que la educación terciaria “es un trayecto diferente y no inferior a la formación universitaria”, y responde a las necesidades y particularidades de cada contexto local o regional. “Ambas forman parte del derecho a la educación pública, con igual importancia. La educación terciaria forma estudiantes para el mundo del trabajo, en relación directa con el mismo, con prácticas de formación profesional o tecnológica que posibilitan el crecimiento comunitario y su desarrollo”, aseveraron. 

Además, advirtieron que en ningún momento se consultó ni pidió opinión al sector cuya actividad se pretende regular. “De aprobarse esta ley en la forma en que está redactada, sería excluyente, sectaria y lesiva de los derechos a la educación y al trabajo”, denunciaron y reclamaron la revisión del proyecto que, a su entender, ahora “estaría limitando la libertad de expresión”.