Hicimos la denuncia de lo que pasó en los Juzgados Federales Nº 1 y Nº 2, pero hay muchos casos similares que la gente no se anima a denunciar por temor a represalias”.

Al respecto, Constancio relató que “mi caso sucedió el 3 de agosto cerca de las 22:30 hs., estábamos con un grupo de amigos en el barrio Salvador Massa tomando una cerveza afuera de un kiosco. Apareció una grupo de agentes del departamento de Toxicomanía, nos apuntaron con las armas, a mi me pegaron un culatazo en la cara, nos tiraron al suelo y nos dijeron que se trataba de un allanamiento”.

“Lo que vi fue como en el interior del kiosco un policía que está identificado como Facundo Q. metió la mano a su bolsillo y sacó un envoltorio pequeño, transparente con letras rojas y lo arrojó al suelo, para mí la intensión era hacer creer que allí se vendía droga”, agregó.

Constancio manifestó que, “los policías se dieron cuenta de lo que observé y nos llevaron a todos en calidad de demorados a la seccional 9ª de San Pedro. Allí, nos desnudaron para requisa según los agentes, a mi me llevaron al baño, me esposaron y me pegaron con el fin de que no diga nada de lo que había visto en el operativo”.

El 4 de agosto, cerca de las 19 hs. Constancio recuperó la libertad y expresó que “desde aquel día la policía me amenaza en la calle, me dijeron que me iban a hacer desaparecer si denunciaba lo que vi. Incluso el subjefe de Toxicomanía de apellido T. me ofreció dinero para que no hable, le dije que no”.

Finalmente, Constancio dijo que “En San Pedro de Jujuy, te detienen muchas veces sin prueba alguna y te picanean, te hacen submarino seco.

Así no se puede vivir, no se puede salir o reunirse en la calle porque te detienen sin razón alguna. Hay mucha gente que sabe lo que hacen algunos policías y no quieren denunciarlos por temor a represalias, temen por sus familias”.