La debacle de Mar del Plata: Zonas liberadas, basura y 1.7 millones al cantante Axel.La debacle de Mar del Plata: Zonas liberadas, basura y 1.7 millones al cantante Axel.La debacle de Mar del Plata: Zonas liberadas, basura y 1.7 millones al cantante Axel.FacebookTwitterCorreoWhatsAppTelegram

De feliz le queda poco y nada. Si hasta Mirtha Legrand, quien desde hace ya varias décadas transmite en directo sus almuerzos en la ciudad durante la temporada de verano, se animó a criticar duramente al intendente Carlos Arroyo y a asegurar que “Mar del Plata está llena de basura”.

En efecto, un conflicto laboral derivó en un paro de recolectores de residuos y la ciudad amaneció tapada de bolsas, botellas de plástico y basura de todo tipo. Se le sumó una retención de tareas de los empleados municipales, por lo que a la suciedad generalizada se le sumó una parálisis total de los servicios y trámites, funcionando tan solo con guardias mínimas.

 

“Falta plata, no hay nada”, aseguró un funcionario local ante REALPOLITIK. El ajustado presupuesto debe haber incluido a las policías locales, dado que en amplias zonas de Varese y Playa Grande no hay quien patrulle por las noches. Vecinos de la zona de Colón y Costanera denunciaron que por las noches se corren picadas de autos y motos, con los típicos sonidos ensordecedores de los caños de escape modificados y las explosiones que, por alguna inentendible razón, se pusieron de moda en el submundo de las corridas de motos de baja cilindrada.

 

No obstante ello, los hechos parecieran apuntar a que plata, al contrario de lo que aseguran desde el municipio, hay. Y mucha. Tanta, que a pesar de no contar con un centavo más para los recolectores de residuos o los empleados municipales, si hay para pagarle 1.715.319 millones al cantante Axel. Sólo su cachet, acorde al documento firmado por Gabriela Magnoler, presidente del Ente Municipal de Turismo marplatense, ascendió a 1.517.000 pesos. El resto se fue en viáticos para la banda, el micro de la gira, la hotelería, el transporte interno y el fee de la producción local.

Alejada de sus años de gloria, Mar del Plata encara la temporada 2019 con más bajos que altos, superada por la basura y sus propios demonios, que no tiene plata para enfrentar. Es que, aunque parezca insólito, ya se la dieron toda a Axel.