La Municipalidad de Santa Rosa da por probado que la empresa Jubete no cumplió con el contrato de obra de las cloacas en el barrio Butaló. Esa aseveración figura en el dictamen que hizo el director de Asuntos Jurídicos, Claudio Pérez de la Prida, y que no deja lugar a dudas respecto del modo en que se burlaron las especificaciones técnicas.

El propio funcionario interpretó que además de la solución que requieren los vecinos con urgencia, el camino es una denuncia judicial para que se investigue si la empresa Jubete y/o funcionarios de la gestión de Luis Larrañaga cometieron delitos.

Anticipó que será la Justicia la que determine si hay delitos, y en ese caso cuáles. Mientras tanto, el Ejecutivo Municipal mantuvo contactos con la firma Jubete: el secretario de Obras Públicas, Mario Cortina, hizo un análisis positivo de una reunión con representantes de la empresa.

El director de Jurídicos dijo, sin medias tintas: “Nos ha tocado dictaminar por la obra y hemos emitido opinión: se debe emplazar a la empresa a que acompañe el plano conforme a obra y haga los trabajos que se contrataron y pagaron y la empresa realizó. Está comprobado”.

“Tenemos la certeza, por el hallazgo de pruebas, de que la empresa no cumplió con las condiciones y trabajos para los cuales fue contratada”, insistió el funcionario.

Además, confirmó que “los planos no están. Emplazamos a la empresa para que los presente y no lo ha hecho”.

Contrato incumplido

“La empresa no ha realizado las tareas por las cuales cobró de las acometidas, los caños que van del caño troncal principal hasta un metro de la línea municipal, que divide la vereda de la propiedad del vecino”, precisó De la Prida.

Reiteró que el emprendimiento “no se hizo como lo establece el contrato de obra pública. Eso ocurrió en todas las casas. Y en dos o tres casos ni se conectó. En los casos en que sí se conectó, no cumplimentó las especificaciones técnicas. Hay pruebas suficientes de que la empresa dejó los caños viejos que van a los domicilios”.

El funcionario contó que antes de sumar las pruebas suficientes para esa conclusión “teníamos indicios: si uno va a la zona, cuando abre la zanja se ve -y por eso se tapó con asfalto- que el caño va por la mitad de la calle, pero no las que van a cada domicilio. Debían ser a cielo abierto, había que romper de manera perpendicular a las casas y levantar veredas. Nada de eso se hizo. El contrato no se cumplió”, aseveró.

Añadió que como parte del proceso se dieron varios pasos en busca de una solución: “En su momento invitamos a la empresa a que técnicamente explicara qué había hecho. Pero ya tenemos la certeza de que no se hizo como dice el contrato”.

“Creo que la empresa acercará una propuesta, pero tendrá que hacer el trabajo que no hizo, unas 350 acometidas desde el caño principal”, dijo.

De la Prida aseguró que en el proceso de la obra de Jubete “hay una irregularidad indudable. Hubo funcionarios que pagaron, gente que controló la obra, si es delito penal lo establecerá la Justicia. Privilegiamos solucionar el problema de los vecinos, pero la irregularidad está y no descartamos hacer la denuncia penal”.

Comentó que “hay un ítem específico que es acometida, y un certificado que se pagó que es acometida. Dice expresamente cómo debía realizarse eso, qué caño, de qué diámetro, por dónde. Eso se cobró, es un importe importante, más la redeterminación de los precios, pero no se hizo como dice el contrato”.

“La idea es que lo que no se hizo, se haga”, completó De la Prida.