“Un millón de créditos hipotecarios”, eso prometió Macri si sale electo presidente. Sin embargo, en el área de vivienda la subejecución presupuestaria de la gestión PRO ha sido sistemática. Entre 2008 y 2014, el Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) decidió no utilizar 1.536.754.005 pesos que tenía presupuestados. Es el equivalente a más de 3073 créditos de vivienda de 500 mil pesos, en una ciudad que en este lapso vivió un crecimiento del 50% de la población en asentamientos precarios.

Mientras en 2008, el presupuesto del IVC ocupaba el 2,79% del total de la Ciudad, este año el rubro “vivienda” representa apenas el 1,36 por ciento. Al cabo del primer semestre de 2015, el IVC continuó con su política de subejecución: usó apenas el 25% de su presupuesto de 1179 millones de pesos. El programa Hotelados (con 9 millones asignados) tuvo 0% de ejecución, lo mismo que el programa para la integración y transformación de villas y núcleos habitaciones, que tenía $ 1,7 millones presupuestados. En casi ocho años quedaron sin usar 91.696.676 millones de pesos destinados a villas. “Es un programa histórico de la Ciudad que durante este gobierno fue vaciado financieramente”, resalta Luna Miguens, coordinadora del área Derechos Económicos Sociales y Culturales del CELS. El organismo presentó un amicus curiae para que se cumpla la urbanización de la villa Rodrigo Bueno, que obtuvo en primera instancia un dictamen favorable de la justicia porteña, luego apelado por el gobierno porteño, algo similar a lo sucedido con la urbanización, tampoco cumplida, del asentamiento Zavaleta. “La política de vivienda del macrismo es ineficiente, pero en realidad muy eficiente en lo que busca lograr, que es mantener la situación como está. No hay voluntad de transformar la situación en la que viven las casi 700 mil personas con déficit habitacional que habitan la Ciudad, ya sea en villas, inquilinatos, pensiones o en situación de calle. Mientras tanto, hay una dinámica inmobiliaria desfasada de las necesidades habitacionales”, agrega Miguens. Lo que no se ejecutó en promedio es el 33,33 por ciento. El programa “Créditos Primera Vivienda”, por ejemplo, tiene este año asignados tan sólo 3,1 millones de pesos. La gestión macrista no llegó a construir 600 viviendas, y la mayoría por orden judicial, entregadas a la Asociación Casa Amarilla. No se promovieron los créditos hipotecarios y no es fácil alquilar. La Ciudad lanzó el programa Alquilar Se Puede. En septiembre, según una nota difundida por el diario La Nación, hubo sólo diez familias beneficiadas, sobre 15 mil solicitudes. Párrafo aparte merece el programa Rehabilitación de Conjuntos Urbanos, que en los primeros seis meses de este año tuvo unw 29% de ejecución: 63,5 millones sobre un total de 217. En los siete años anteriores, el PRO dejó sin utilizar para este programa 138.521.433 pesos. Incluía, entre otros ítems, la recuperación, mantenimiento y puesta en valor del Complejo Urbano Soldati, donde en septiembre pasado falleció un joven de 17 años, Cristian Crespo, al ceder una baranda que estaba “floja”. «