Tras pasar ocho horas en los tribunales de Rocha, Richard "Conejo" Gutiérrez, quien era el principal sospechoso por el crimen de Lola Chomnalez, fue liberado luego de declarar ante la jueza y ser sometido a una rueda de reconocimiento y un careo. A las 18 horas de Argentina, dejó el edificio junto a su madre, mientas les hacía señas a los periodistas que hacían guardia en el lugar.

"No hay nada consistente contra él. No se lo puede ubicar en el lugar del crimen", dijo a El Observador el vocero del Poder Judicial, Raúl Oxandabarat.

Este jueves por la mañana hubo una gran confusión, ya que el diario más grande de Uruguay, El País, informó que "Conejo" había confesado a la policía que era el autor del crimen. Sin embargo, el dato fue desmentido por el Ministerio del Interior y el jefe de la policía de Rocha, Oscar Miraballes.

Entre otras cosas, la jueza Marcela López ordenó ayer una fallida rueda de reconocimiento de los dos testigos que participaron de la confección del identikit que divulgaron las autoridades uruguayas: un carpintero que asegura haber visto a una persona caminando atrás de Lola en la playa y el changarín que halló el cuerpo, que asegura que había un sujeto cerca del lugar que le llamó la atención. Ninguno de los dos pudo reconocerlo.

La magistrada también dispuso un careo entre "Conejo" y los albañiles que trabajaron junto a Gutiérrez pintando el techo de una casa frente a la playa –cuya propietaria declaró ayer–, y que aseguraron que el 28 de diciembre, el día en que habría muerto Lola, el sospechoso desapareció durante tres horas, entre las 15 y las 18, y regresó con bolsas con comida que dijo que había comprado con dinero que encontró. Sin embargo, la medida tampoco arrojó ningún resultado positivo.

"Se fue en libertad absoluta, porque no tiene nada que ver con el hecho", señaló el abogado defensor de "Conejo". Y anticipó que presentará acciones judiciales contra el diario El País. "Me encantaría saber de dónde sacaron esa novela de que confesó. El señor no se va a quedar cruzado de brazos porque fue escrachado con su imagen como el asesino", advirtió.

Por su parte, el abogado de la familia Chomnalez, Jorge Barrera, aseguró que "se avanzó sobre algunos datos que no se tenían hasta el momento", pero lamentó que "faltan las respuestas que se merece la familia".

 

 

Mientras, la policía continúa rastrillando la zona en la que apareció el cuerpo de la adolescente con un helicóptero y drones. Buscan la mochila rosa con la que Lola salió de su casa el día en que la mataron.

 

También hoy se realizaron una serie de allanamientos en Valizas y Cabo Polonio en los que se secuestraron varios objetos que serán analizados por la Policía Científica.

Además, la magistrada analiza los resultados de las pericias al teléfono de la víctima y los tres objetos hallados en la escena del crimen: una colilla de cigarrillo, un buzo de hombre y una madera con cabellos.