Joaquín La Madrid ("Cambiemos" de Concordia) presentó, este jueves, un nuevo Proyecto de Ley que impulsa el uso de colectores de energía solar para el calentamiento de agua en viviendas de uso familiar. El espíritu de la iniciativa es el cuidado de la energía y nuestros recursos naturales. 

La propuesta plantea el otorgamiento de un beneficio impositivo a aquellos inmuebles en los cuales se opte por instalar colectores solares. "El calentamiento de agua mediante energía solar, más allá de ser una alternativa amigable con el ambiente, se ha convertido en una opción económicamente atractiva y competitiva", destaca el legislador entrerriano.

¿Qué es?

Un colector de energía solar es un dispositivo utilizado para recaudar, absorber y transferir energía solar térmica de baja temperatura al agua de uso y consumo doméstico. Están formados por una cantidad de conductos que captan el calor generado por la exposición directa a los rayos del sol y que es transferido al fluido, en este caso agua, que circula en su interior aumentando así su temperatura.Al incorporarse el agua en el sistema doméstico de calentamiento para calefacción, uso o consumo, se requiere menos energía para alcanzar la temperatura deseada. En consecuencia, el consumo de la energía (generalmente proveniente de la combustión de gas o electricidad) utilizada por el sistema domiciliario de calentamiento de agua se reduce.

Expresó, al presentar el proyecto de Ley, que "me alegra que ahora distintos estamentos del Estado nacional y provincial se pongan en relación con los tiempos que corren y las demandas del ambiente; algo sobre lo que vengo trabajando incluso desde antes del comienzo de mi gestión".

Recompensa del Estado

El legislador provincial se mostró, según una gacetilla recibida por El Entre Ríos, "consciente del costo que implica la adquisición e instalación del sistema". Propone, entonces, la desgravación impositiva como recompensa lógica para beneficiar a quienes implementen este tipo de tecnología, ya que de esta forma se ahorrará al Estado provincial dinero que de otro modo debería erogar en la distribución de energía proveniente de fuentes no renovables.

El artículo 2 del Proyecto declara eximir del pago del impuesto inmobiliario urbano a aquellas viviendas de uso familiar que implementen el uso de colectores de energía solar, por un plazo de cinco años según el porcentaje establecido en la siguiente regulación: Primer año: exención del 35%; segundo años, del 30%; tercero, del 25%; cuarto, del 20% y quinto año, del 15% del impuesto. Pero se aclara que en ningún caso el monto total de este beneficio podrá superar el valor total del colector solar, más los costos de su instalación.

"El monto de la exención propuesta supone y pretende que sea un porcentaje significativo y pueda ser un efectivo fomento a la implementación de esta tecnología", señaló el representante de la Cámara Baja.

El Proyecto también indica que el proceso de recolección de la energía debe cumplir con los estándares fijados por las normas IRAM 210002-1:2016, IRAM 210004:2016 e IRAM 210007.

Las ventajas del sistema propuesto

La disminución en el consumo de energía convencional que brindan los colectores solares, trae aparejada varias ventajas. En primer lugar, genera ahorro de dinero frente a un costo fijo como es el pago regular de la tarifa de electricidad o gas. También pone al consumidor en una posición de mayor independencia al dejarlo menos expuesto frente a los cortes en el suministro de estos servicios. 

Por otro lado, favorece a que haya mayor disponibilidad energética, especialmente en épocas invernales, cuando la demanda es más elevada. Por último, y no por ello menos importante, tenemos las ventajas ambientales que el ahorro energético genera. Al respecto, debemos mencionar en particular los efectos que acarrea la emisión de gases de efecto invernadero producto de la quema de combustibles fósiles, grandes responsables del calentamiento global.

De acuerdo con un informe del CONICET, calentar agua demanda un importante consumo energético en una casa y ocupa el segundo lugar en lo que uso de energía hogareña respecta luego de la empleada para la climatización. El consumo medio diario de agua calentada es del orden de los 40 litros por persona. En los países en vías de desarrollo, calentar agua demanda entre el 30 y el 40% del consumo energético de un hogar; mientras que en un país desarrollado baja al 26%.

El Proyecto fue apoyado por todos los legisladores del Bloque Cambiemos, entendiendo que se trata de una decisión necesaria para mantener la coherencia con las exigencias ambientales actuales y las acciones que ha emprendido el Gobierno nacional en este sentido.