El debate por la utilización de fuegos artificiales se da siempre para la época de las fiestas, pero este año se presenta de manera particular y abarca el área metropolitana. La semana pasada, el Concejo Municipal de Rincón aprobó una ordenanza que declara a la ciudad “territorio libre de pirotecnia”, en tanto, el 20 de noviembre se estará debatiendo en el Concejo de Santa Fe un proyecto de similares características que sirvió de base para lo aprobado en la ciudad costera.

El mismo día en Santo Tomé, a las 19, se realizará una audiencia pública que tiene por objetivo generar un espacio de discusión, sobre el uso de pirotecnia durante las fiestas de fin de año. La consulta será no vinculante, pero servirá para llevar claridad sobre el tema.

En diálogo con Diario UNO, la concejala Daniela Qüesta contó que esta será la tercera experiencia (las anteriores fueron en 2009 por la emergencia nocturna y el año pasado, por el nuevo puente Santa Fe-Santo Tomé) que tiene la ciudad en este tipo de consultas y que va a ser una buena medida para conocer la opinión de los expertos, los ciudadanos y las partes involucradas en la temática.

Qüesta lamentó que la discusión se dé cerca de fin de año y no en otro momento, pero reconoció que son temas de los que la ciudadanía debe comenzar a hablar y a definir políticas en torno a ellos. La edila no se mostró de acuerdo con la prohibición como forma de abordar algunos temas, y sí con la idea de conocer la opinión de las partes involucradas y encontrar desde allí la posibilidad de definir una medida concreta que redunde en beneficio de la mayor parte de los vecinos. En este sentido, para Qüesta, una consulta pública serviría para clarificar el panorama sobre un tema en el que parece no haber puntos medios. Para la concejala este es el mejor método de participación en el que todos pueden exponer su opinión y que la misma sea considerada.

La inscripción para la audiencia comenzó el lunes y desde el Concejo esperan que la participación sea grande y que los santotomesinos se involucren en buscar una solución a la discusión. Los interesados en anotarse para participar tendrán tiempo hasta el 18 de noviembre.

Diversos estudios

Sin hablar de los accidentados que año a año asisten a los servicios de urgencia de sanatorios y hospitales del país, y que afortunadamente vienen en descenso, la pirotecnia es un tema que se viene discutiendo desde hace mucho tiempo a nivel mundial. Existen numerosos estudios por parte de médicos, fonoaudiólogos, veterinarios y ambientalistas que afirman que el uso de pirotecnia genera en los animales palpitaciones, taquicardia, temblores, jadeo, salivación, falta de aire, sensación de irrealidad, náuseas, aturdimiento, pérdida de control, desesperación, miedo y hasta la muerte. Las explosiones repercuten particularmente a los perros que suelen sentir temor y al huir pueden ser víctimas de accidentes o perderse; en tanto, los gatos suelen correr detrás de los explosivos por simple curiosidad pudiendo ingerirlos, perder la vista o lesionarse.

Por otra parte, los ambientalistas sostienen que los colores luminosos de la pirotecnia se deben a que contienen una gran variedad de químicos tóxicos, que afectan a las personas y a los animales. Además están compuestos por sustancias carcinógenas que se alojan en el suelo y el agua. Sin mencionar el humo y basura que dispersan.

A favor del uso 

Finalmente, Daniela Qüesta sostuvo que, a pesar de lo anteriormente expuesto, existe otra parte de la población santotomesina que opina que la utilización de pirotecnia es una parte arraigada de la cultura festiva de fin de año y no está de acuerdo con la prohibición. Hay muchos ciudadanos que opinan que si la pirotecnia obtenida está autorizada para su comercialización y se utiliza de la manera indicada, son pocas las probabilidades de que ocurra un accidente.