María Eugenia Vidal recibe los coletazos de la crisis económica y política que impera en el gobierno nacional. Las decisiones de ayer de Olivos, puntualmente las definiciones respecto de la eliminación de ministerios, impactaron en el gobierno provincial, donde esperan medidas similares.

 

"La idea de un achicamiento de la estructura de ministerios es algo que se viene hablando hace ya algunas semanas", dijo a LPO una fuente del gobierno. Por el momento no hay definiciones, pero si la certeza de que Vidal siempre tuvo una mirada de espejo con Nación en cuanto a las definiciones políticas.

A la tensión por los posibles cambios se le suma además algo inevitable: la casi total paralización de la obra pública. Mientras tanto, voceros del gobierno desmintieron la posibilidad de un achicamiento en el gabinete, aunque nada dijeron respecto del parate en las obras.

Pero lo cierto es que los rumores y trascendidos ya están instalados en los esquemas ministeriales del gobierno provincial. Vidal podría avanzar en los próximos días en una nueva reforma de la ley de ministerios.

 

Mientras tanto asoman algunas particularidades: la posibilidad de fusionar Justicia y Seguridad en un solo ministerio (así funcionó durante buena parte de la gestión de Daniel Scioli) no sería una opción. ¿El motivo? El peso de los dos ministros. Es que tanto Cristian Ritondo (Seguridad) como Gustavo Ferrari (Justicia) son dos funcionarios de mucho peso en el gabinete y una fusión sería una fuerte desacreditación para uno de ellos.

 

Varias fuentes en La Plata coinciden en que un esquema de achique podría resultar en un super-ministerio de Economía. La idea no es nueva y circuló en algunas de las reformas ministeriales que encaró Vidal. Ahora, la posibilidad de pensar a Ciencia y Tecnología; Producción y hasta Agroindustria dentro de la cartera que conduce Hernán Lacunza vuelve a sonar fuerte.

 

Sobre Lacunza hay sensaciones encontradas en el Ejecutivo. Son muchos en el gobierno quienes no dudan en dejar trascender su malestar con el ministro, pero al mismo tiempo son los mismos que coinciden en afirmar que es el mejor funcionario del gobierno de Vidal.

 

Las diferencias parecen estar en su firmeza al momento de liberar algunas partidas presupuestaria y el trato cotidiano dentro del gabinete.

 

Pero hay otras variables a tener en cuenta en caso de una movida como esta: Si el ministerio de Ciencia y Tecnología pasa a tener rango de Secretaría y a depender de Economía, el radicalismo se quedaría sin ministerios. El titular de ese área, Jorge Elustondo, responde directamente al vicegobernador Daniel Salvador. Según pudo saber LPO, el propio Salvador se ocupó de llevar tranquilidad esta mañana a algunos referentes del radicalismo.

 

Otro ministerio que podría absorber más áreas es Desarrollo Social. Es que allí va a estar el foco de atención de la Gobernadora en los próximos meses. LPO adelantó el viernes que Vidal ordenó a sus ministros reasignar partidas del presupuesto actual para contener la crisis.

 

La Gobernadora quiere un fondo de $1000 millones que surja de todas las áreas del gobierno y que Desarrollo Social bajará a los sectores más vulnerables de la provincia. Por eso, algunos mencionan la posibilidad de jerarquizar Desarrollo Social anexándole el ministerio de Salud.

El ministro de Asuntos Públicos, Federico Suárez.

Otras áreas que perderían el rango de ministerio es Cultura que podría volver a la instancia de Instituto Cultural como lo fue durante la gestión de Scioli o fusionarse con otra área.

 

Algo similar ocurre con el ministerio de Asuntos Públicos, un área jerarquizada a fines de 2017 (antes se denominaba Secretaría de Comunicación) para potenciar el rol de Federico Suárez como vocero del gobierno en las paritarias.

 

La obra pública en jaque

 

La preocupación más grande que transmiten en La Plata de cara al futuro del gobierno de Vidal tiene que ver con la obra pública. En reserva, desde el Ejecutivo comenzaron a admitir lo que negaban hasta hace pocos días: que se viene un ajuste violento sobre la obra pública de la provincia.

 

Las fuentes coinciden en que la imposibilidad de buscar financiamiento impactará de lleno en las obras que Vidal proyectaba como identidad de su gestión de gobierno. Además admiten que no solo están comprometidos los trabajados anunciados a futuro, sino que también lo está la obra que actualmente está en marcha. "Hoy está resentida hasta la obra que arrancó antes de las corridas cambiarias de mayo", dijo una fuente del gobierno.

 

El remate que lanzan en el gobierno sobre la crisis actual es gráfico y a la vez aterrador para el vidalismo: "Lo que sigue va a ser una gestión con un claro perfil sciolista", se resignan.