En la apertura del período de sesiones ordinarias de la Legislatura, el gobernador Juan Manuel Urtubey ratificó el rumbo elegido hace más de seis años para que Salta continúe su política de desarrollo con todos los sectores socioeconómicos y sin excluidos ni olvidados.

Éste es el séptimo mensaje del mandatario frente a la Asamblea Legislativa. Reconoció aciertos y errores y sostuvo que el saldo de su gobierno es positivo para el pueblo salteño. También dijo que en un año que se avizora difícil, la provincia está bien administrada lo que permite hacer frente a los desafíos que plantea la nueva coyuntura económica. Ante este escenario, volvió a convocar a todos los sectores, para que aun en el disenso, las “cosas continúen su cauce, como pasó todos estos años”.

Destacó que el impulso del Gobierno y de los sectores privados hizo posible la puesta en marcha del Consejo Económico y Social, herramienta que “en muy poco tiempo será escenario por excelencia para que toda la comunidad pueda participar en políticas públicas, muchas de ellas definidas en el Plan de Desarrollo Estratégico Salta 2030”.

Urtubey también anunció que remitirá a la Legislatura una serie de proyectos de ley tendientes a establecer mecanismos institucionales que profundicen la transparencia y control sobre el funcionamiento de las instituciones del Estado y el desempeño de los servidores públicos. Mencionó de manera especial el proyecto de administración financiera y para la reforma parcial de la ley de Contrataciones del Estado.

El mandatario llegó a la Legislatura antes del mediodía, donde fue recibido por el presidente de la Cámara de Senadores, Andrés Zottos. En el recinto de sesiones saludó a legisladores nacionales y provinciales, funcionarios de todos los poderes y a su madre, Lía Mera Figueroa.

Hizo especial énfasis en la lucha emprendida contra la desnutrición y destacó el centro que el Gobierno construye en Morillo para CONIN, adelantando que próximamente se hará lo mismo en la Capital. En este punto mencionó la ayuda que el Estado provincial recibe de este tipo de instituciones, también de UNICEF, para hacer frente a esta realidad que calificó de “flagelo”. Volvió a ponderar los logros que se alcanzan para la sociedad cuando el trabajo es compartido, “lo que nos permite potenciar nuestra acción”.

“Decía que se presenta un año difícil. Yo prefiero verlo como un año de trabajo y de unión. De desafíos compartidos. Y de enorme responsabilidad para este gobierno. Necesitamos estar unidos, unidos en el disenso. Quiero escuchar y que me escuchen”, marcó el mandatario, al recordar que las rencillas y peleas de los políticos son rechazadas con razón por la ciudadanía, que el federalismo es la herramienta de desarrollo más potente con el que puede contar una Nación y que ha luchado por mejorar el régimen de coparticipación federal. “Las reformas introducidas en Salta con el proceso de fuerte descentralización de recursos es una muestra contundente de lo que puede pasar también en el país”, aseguró el mandatario.

Luego de enumerar los avances que se dieron en materia de seguridad con la incorporación de tecnología y recurso humano, de educación para ampliar la oferta a todos los rincones de la provincia y de los esfuerzos que se hacen en materia sanitaria, planteó el tema vivienda como trascendente y remarcó que la Provincia elevó el promedio anual de entrega un 47%. Es el Consejo Económico Social el encargado ahora de analizar y auditar las preadjudicaciones.

“La obra pública ha sido y es la síntesis de lo que entiendo por gestión. Es a partir de ella que un gobierno puede decidir entre la inclusión y la exclusión. Es la obra pública la que permite que todos entendamos que, lo que es natural para nosotros, es un deseo casi desesperanzado de nuestros hermanos”, dijo, para hacer mención a las inversiones en obras de luz, agua, cloacas, pavimento, caminos, salas y hospitales, escuelas. “Mucha de esa obra no se ve, se vive todos los días y le ha cambiado la vida a miles de familias. Para muchas de ellas es un cambio trascendente, como el que vivirán en la Puna las familias de Olacapato, Salar de Pocitos, Tolar Grande y Cobres con la construcción de nuevos gasoductos”.

Urtubey también enumeró los beneficios del turismo y anunció que ayer firmó el decreto para que los “salteños reconocidos con el mérito artístico cuenten, a partir de ahora, con la cobertura de la obra social provincial”. Dijo además que en Salta el desempleo bajó a un 8%, hizo hincapié en la creación de las 45 empresas sociales, en que por sexto año consecutivo se alcanzó la tasa más alta de crecimiento industrial, en la inversión que se hace en la construcción de hospitales como el San Bernardo en el que se volcarán $200 millones para convertirlo en centro de referencia de la región.

Le dedicó varios párrafos al tema seguridad y a los avances conseguidos, por ejemplo, con la reforma del procesal penal. Sentenció que para los delincuentes que condenan a los jóvenes con la comercialización de drogas no habrá contemplaciones, “vamos contra ellos con toda la fuerza que nos da la ley”. “La gente exige que este accionar continúe”.

“Nuestra provincia necesita de todos, de lo mejor de nosotros. De la generosidad de espíritu que puede superar cualquier obstáculo. Y todos debemos recordarlo. Hagamos de este año complicado un año del que estemos orgullosos. Tenemos hombres y mujeres en toda la provincia que lo merecen. No me dejaré vencer por nada. Ni el desánimo de algunos, ni las críticas injustas me alejarán de mis obligaciones con la gente. Tampoco me alejarán de esas obligaciones el aplauso fácil y el elogio inmerecido”.

Urtubey cerró su mensaje con un compromiso con los salteños “a superarme, a mejorar, a cambiar lo que hago mal y a profundizar mucho más lo que hago bien. El pueblo me puso dos veces en este lugar. Y es el pueblo el que juzgará cómo hice las cosas”.