Las últimas gestiones del gobierno para paliar la crisis

Las últimas gestiones del gobierno para paliar la crisis

Fortalecer la economía local es una de las principales preocupaciones para cuando finalice la cuarentena obligatoria. Las negociaciones con Nación y Provincia, claves para el destino de la ciudad.

En coordinación con el Legislativo, el Ejecutivo Municipal extrema medidas para morigerar el impacto de la crisis sanitaria que atraviesa no sólo el país, sino el mundo.

En este marco, tras una  reunión de presidentes de bloque realizada ayer, el Concejo aprobó mediante decreto los dos pedidos ya conocidos por parte del intendente Guillermo Montenegro: el uso de vehículos secuestrados en el plazo que dure la emergencia sanitaria y la aceptación de donaciones sin límites de dinero ya que, según la ordenanza N°23.228, el valor máximo de los aportes de terceros al Municipio en 10 mil pesos.

Pero con un escenario de 11,8% de desempleo y 25% de pobreza en la ciudad, conforme las últimas mediciones del Indec, el gobierno municipal sabe que, a pesar de los cuantiosos esfuerzos en materia de salud que derivaron en la construcción del hospital modular y el acondicionamiento de diversas unidades sanitarias para cuando crezca la propagación del COVID-19, las medidas que se tomen deberán centrarse también en la cuestión económica y la atención de los sectores sociales más vulnerables.

En este marco, la postura, compartida con ediles y funcionarios, es reactivar la economía lo antes posible una vez finalizada la cuarentena obligatoria, en principio, tras la celebración de Pascuas. Y aquí adquiere relevancia el rol del secretario de Desarrollo Productivo, Fernando Muro, para potenciar la producción local.

Uno de los ejes centrales, ya anticipado en campaña y durante el discurso de asunción de Montenegro, es la agilización de las habilitaciones de locales comerciales, facilitando la labor de la subsecretaría de Inspección General. El objetivo apunta a propiciar la apertura de la mayor cantidad de comercios posibles de cara a la temporada 2020/2021.

En esa línea, otro punto para dinamizar la economía regional es la apertura de mercados de productores locales en diversos barrios de Mar del Plata y Batán. Con el aval del Concejo también, el gobierno buscará la forma de cuidar el bolsillo de la ciudadanía. Una posibilidad es la creación de una aplicación para celulares que informe a los vecinos sobre los locales de cercanía que comercialicen productos con precios cuidados.

Con respecto a la cuestión más netamente social, en los últimos días, junto con Provincia, el Municipio avanzó en la entrega de unos 200 bolsones de comida para repartir entre un grupo de trabajadores del puerto, todos ellos afectados por la paralización casi total de la industria pesquera en la ciudad. 

De todos modos, en el Ejecutivo entienden que las medidas de mayor calibre no pueden disociarse de lo que baje- y se negocie- con Nación y Provincia. A raíz de ello, el intendente aguarda a que pase “lo peor” de la pandemia para luego conversar con sendas administraciones sobre las consecuencias económicas y las medidas pertinentes, con un panorama más esclarecido sobre la situación global. “Medidas aisladas no nos sirven. Hay que ver cómo se va a dar empuje económico a Mar del Plata después de todo esto”, planteó un funcionario a este medio.

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