A través de ella, usuarios industriales, comerciales y residenciales pueden encontrar una solución personalizada, saber cuánto cuesta y encargar en el mismo momento de la compra la visita técnica e instalación.

"Todo este proceso, que demoraba 90 días en promedio porque tenías muchos contactos con los clientes, se redujo en un 97% y hoy tarda cinco minutos. Esto nos dice que no sólo se reduce la ejecución de los proyectos sino que podemos llegar a un mercado mayor porque de esta forma acaparamos más gente", afirmó Bril, que es licenciado en Administración de Empresas de la Universidad de San Andrés y tiene 26 años.

El fundador de SolarLatam es Borja Peñalver, que centró sus operaciones en Panamá, Costa Rica y Colombia, mientras que Bril y Caniggia Bengolea se dedicaron primero a desarrollar el negocio en el país para luego expandirse a Chile. En 2017, abrieron la oficina argentina gracias a una ronda de inversores ángeles por US$450.000 y, en noviembre de 2018, lanzaron la plataforma.

Actualmente, reciben entre 100 y 150 consultas al mes salvo por el episodio del apagón de junio pasado cuando todo el país se quedó sin luz, así como parte de Uruguay y Paraguay. "Esa vez en 48 horas pudimos generar 700 visitas, 500 propuestas online, cinco visitas presenciales y una venta en un pueblito de Santa Fe llamado Bouquet en el que un usuario ya está inyectando energía al sistema. Queremos acercar las energías renovables a los usuarios que antes las percibían como algo complejo y lejano, y empoderarlos", aseguró.

 

La instalación en el pueblo de Bouquet

 

SolarLatam ganó recientemente el programa de innovación abierta "Impulso Raízen" llevado a cabo por Raízen Argentina -licenciataria de la marca Shell- con la asesoría de Endeavor. El premio otorgado consistió en la suma de US$5000 y un viaje para dos personas a Pulse, el Hub de Innovación de Raízen en Piracicaba, Brasil.

El siguiente paso es armar una nueva ronda de capital -la serie A de SolarLatam- y recaudar entre 1,5 y 2 millones de dólares para llevar la plataforma a otros países. "De hecho es hasta estratégico hablar con Raízen porque podemos potenciar el negocio. Hay una sinergia entre nuestro proyecto y la movilidad eléctrica. Los que dejen de usar combustible, se pasarán a autos eléctricos y podemos darle electricidad limpia. Creemos que esto es el futuro como lo demuestran países como los Estados Unidos, Alemania y España, entre otros", concluyó Bril.

La facturación de la filial argentina prevista para este año es de US$2 millones, y el próximo esperan facturar entre 5 y 6 millones de dólares al ejecutar la estrategia de expansión.