La situación carcelaria en el sur de la provincia es más que preocupante. Sólo existe una penitenciaría, que está colapsada y vetusta, por lo que muchos sectores piden a gritos la construcción de una nueva unidad carcelaria.

En este sentido, fue el propio director de las penitenciarías de Mendoza, Eduardo Orellano, quien reconoció el preocupante momento que se atraviesa en materia de edificios penales.

Según el titular del Servicio Penitenciario en declaraciones al sitio MDZ, “de acuerdo al coeficiente mundial que se utiliza para medir la población en las cárceles, el problema en la provincia es crítico. Uno de los centros de alojamiento que presentan mayor gravedad es el de San Rafael, que por su ubicación estratégica contiene a las personas en conflicto con la ley de todo el sur de la provincia”.

En este sentido, se remarca que en el futuro va a ser necesaria la construcción de nuevas dependencias, y allí empieza a tallar la necesidad de que se ponga en marcha el proyecto de la penitenciaría nueva para San Rafael.

Aproximadamente, en Mendoza hay unas 3.700 personas alojadas en penitenciarías, cuando la capacidad es de 3.300. El excedente recae mayormente en Almafuerte y San Rafael.

Esta situación preocupa porque, cuando se termine el nuevo penal de Cacheuta, cortará su cinta con su capacidad completa de 400 internos. Es decir que, cuando esté lista la nueva cárcel, el sistema ya estará “lleno”.

Esto se debe a que, aunque se construyan nuevas cárceles, hay un aumento del delito. Por eso, una propuesta es crear espacios especiales para personas que cometan delitos menores y con las que se pueda aplicar otra metodología de trabajo.

En el estimativo de población penal del mes de mayo, Almafuerte tiene 1.100 personas sobre 700 lugares, lo que implica una superpoblación del 57%, mientras que San Rafael aparece con 380 internos cuando su capacidad es de 297, totalizando un 27,9% de superpoblación (83 presos más que la cantidad recomendada).

En el penal de Boulogne Sur Mer se registraron 990 internos sobre 926 lugares, mientras que en San Felipe hay 1.050 sobre 960 espacios. Asimismo, el Borbollón cuenta con 110 internos que ocupan 90 espacios.

AÑOS ANTERIORES

Este año, San Rafael presenta una de las poblaciones carcelarias más elevadas de los últimos tiempos, con 380 personas. En tanto, en 2012 se registraban 346, en 2011 eran 365, en 2010 sumaban 367 y en 2009 fueron 355, según los informes del Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena.