En una sesión especial y atípica, la Legislatura porteña votó todo lo que pedía Horacio Rodriguez Larreta en medio de la cuarentena, casi por unanimidad: la ratificación de los DNU que adhieren a la emergencia por la pandemia y la cuarentena y dos proyectos clave para endeudarse, uno por $9 mil millones para pago a proveedores y otro para emisión de deuda por U$S 150 millones en función de la baja de la recaudación que provoca el aislamiento y mayores gastos para combatir la epidemia.

 

La escenografía inusual le dio un marco de solemnidad al formal debate, aunque no se privaron los bloques de hacer cada uno sus discursos aunque no se permitió que los diputados hablaran desde las "bancas" de ocasión.

 

El jefe de la casa, Agustín Forchieri (PRO) organizó la sesión con prevención por la pandemia. No se usó el recinto, sino el Salón Dorado donde se dispuso un escritorio y un atril a modo de escenario y, como público prudente, en sillas con la distancia aconsejada para evitar el contagio del coronavirus se sentaron los legisladores. No hubo público ni asesores como regla de funcionamiento en epidemia.

 

Para tomar la palabra debieron ir hasta el atril donde el micrófono se cubrió con un plástico que se reemplazaba cada vez, todo acompañado de frascos de alcohol en gel, como detalle de una sesión histórica en medio de una pandemia.

 

El legislador Claudio Romero fue quien presentó los proyectos que se debatieron en el recinto de emergencia. Luego diputados de la izquierda con severas críticas a la gestión de Horacio Rodriguez Larreta también tomaron la palabra y entre otros del bloque radical, lo hizo Martín Ocampo. Del Frente de Todos se expresó Leandro Santoro y la legisladora María Rosa Muiños, entre otros.

 

Cerca de tres horas se extendió la ceremonia que además incorporó la sanción de una modificación al reglamento de la Legislatura para permitir "por razones de fuerza mayor" las sesiones a distancia tanto como la presentación de proyectos por parte de los diputados.

 

En la Ciudad los Decretos de Necesidad y Urgencia que emite el ejecutivo deben tratarse para aprobarlos o rechazarlos en un plazo de 30 días. De otro modo, pierden vigencia. De allí la necesidad de la convocatoria a la sesión especial que le dio finalmente la aprobación a cuatro DNU por 56 votos a favor y una abstención, excepto para la iniciativa que aumentó las penas para quienes no cumplan con el aislamiento obligatorio. En ese caso, la norma obtuvo 54 votos afirmativos y 3 negativos con la presencia de 57 de los 60 legisladores del cuerpo. Los legisladores aprobaron 4 DNU emitidos por Larreta referidos a la emergencia sanitaria, prórroga en trámites y en las licencias de conducir y la modificación que sube penas por incumplimiento de la cuarentena.

 

Para los proyectos referidos a los endeudamientos, Larreta obtuvo 53 votos a favor y 4 en contra.

 

El martes de la semana pasada, el jefe de Gobierno porteño presentó los últimos dos proyectos. Uno es el referido a la ampliación en $9 mil millones de una iniciativa que había solicitado para el pago a proveedores hasta el 31 de diciembre de 2019 y el otro solicita un empréstito por U$S150 millones en función de las partidas que demanda la pandemia.

 

En los fundamentos se señala que una ley sancionada en diciembre pasado autorizó a la administración porteña a emitir en el mercado local un título de deuda en pesos para cancelar obligaciones con proveedores contraídas hasta el 31 de diciembre pasado por $9000 millones y fundamenta que ante "un escenario de mayor contracción de la actividad económica" que derivará en la caida de la recaudación sumado a los gastos que demanda enfrentar la pandemia solicita extender hasta el 15 de abril los términos de la ley sancionada y ampliar el monto de la emisión original en otros $ 9000 millones.

 

La otra iniciativa que se aprobó pide contraer uno o más empréstitos en el mercado local o internacional por un monto de hasta U$S 150 millones, para destinar a la atención de la emergencia sanitaria.

 

Para finalizar la sesión, Forchieri agradeció a los legisladores y a los trabajadores de la Legislatura y sentenció "todos juntos y unidos" como más les guste la palabra, para combatir la pandemia.