Es una paradoja: el año en el que la salud fue la prioridad, el sector vive una de sus crisis más agudas. Los prestadores privados, clínicas, hospitales y profesionales están en una situación dramática que puede afectar a la salud pública (porque 7 de cada 10 argentinos utilizan esos servicios) por los problemas económicos. En Mendoza el tema repercute fuertemente y los prestadores tomaron una decisión para poner en alerta sobre la situación: suspenderán las prestaciones programadas durante la mañana del lunes. Es decir, todos los turnos programados no se atenderán. 

La medida se da como reclamo a la falta de actualización de los valores que pagan las empresas de medicina prepaga y obras sociales. Pero también al cese de las líneas de ayuda que el Gobierno nacional ha lanzado para el sector, que vencen el 31 de diciembre. 

Según explicaron referentes del sector a MDZ, la situación es dramática para la subsistencia de muchos prestadores. Incluso para hacer frente a la pandemia, muchos tuvieron que invertir o reconvertir sus instalaciones. Pero no han recibido compensación por ello: los valores de las prestaciones se congelaron en la mayoría de los casos a fines del 2019. Además, por la misma pandemia muchas prácticas dejaron de ser demandas. 

A eso se le suma otro problema. Las obras sociales no pagan en tiempo y forma. "El PAMI, por ejemplo, no ha cumplido el total de lo pactado frente al covid", explican. "La situación es terrible, los prestadores están fundidos", explicó un referente del sector a MDZ. 

El sistema de salud es uno solo y se divide en efectores públicos y privados. Más que nunca este año funcionaron de manera coordinada para dar respuesta a la crisis generada por la pandemia. Pero los efectores privados no tienen cómo sostenerse. 

 

Las acciones

En Mendoza la protesta será progresiva. El lunes el corte de prestaciones será entre las 9 y las 12 de la mañana. En ese lapso se suspenderán los turnos y prestaciones ambulatorias. Luego se analizarán los pasos a seguir

Los financiadores del sistema de salud -obras sociales nacionales, provinciales, PAMI y empresas de medicina prepaga- han mantenido casi sin aumento los aranceles durante todo el año -exceptuando algunos casos específicos con montos insuficientes-, mientras los prestadores tuvimos que afrontar aumentos de costos de más del 60%. Por esa razón, consideramos que la salida de la crisis de los prestadores deberá combinar ajustes de aranceles de los financiadores con un ordenamiento impositivo distinto al actual, que está hundiendo al sector privado de la salud desde mucho antes de la pandemia", explicaron desde la asociación que nuclea a todas las clínicas del país. 

"Entendemos que esta decisión - la protesta -  es antipática y molesta para nuestros pacientes, pero habiendo agotado todas las instancias de diálogo con las autoridades nacionales, sin tener aumentos de los aranceles por parte de los financiadores y con impuestos cada vez más altos, la suspensión de prestaciones será una realidad a corto plazo como consecuencia de la falta de fondos suficientes para prestar servicio como lo hicimos hoy", explicaron.