La Cámara Federal de Salta rechazó la recusación de Carlos Pedro Blaquier contra el juez Fernando Poviña, quien lo procesó por delitos de lesa humanidad en Jujuy en la última dictadura. La defensa del empresario utilizó insólitos argumentos para intentar apartar al magistrado, al considerar que su "empatía" con las víctimas le imposibilita "impartir justicia con objetividad e imparcialidad".

Los jueces Roberto Loutayf Ranea, Federico Díaz y Jorge Villada rechazaron in limine el recurso presentado por los defensores de Blaquier por considerarlo extemporáneo, ya que fue presentado fuera del plazo legal permitido. Con esa decisión, los camaristas frustraron una de las últimas chances de Blaquier y del ex administrador de Ledesma Alberto Lemos para intentar evitar el juicio oral. Ambos tienen procesamiento confirmado en dos causas por delitos de lesa humanidad: se los acusa de haber tenido un rol de partícipes en 23 secuestros por haber facilitado vehículos e infraestructura de la empresa.

Al igual que con el caso del fiscal ad hoc de Jujuy, Pablo Pelazzo, apartado de las causas por la misma Cámara, la defensa de Blaquier y Lemos cargó contra el juez Poviña, quien lleva la instrucción del expediente y decidió su procesamiento.

Entre los extraños argumentos que utilizó la defensa, llevada adelante por los ex jueces federales Horacio Aguilar y Jorge Valerga Aráoz, figuran que Poviña tiene "una convicción ideológica y una visión chauvinista provinciana contraria a Ledesma".

Sostuvieron también que el juez "está sujeto a un condicionamiento espiritual tan fuerte con la querella y el fiscal Pelazzo que le impide adoptar decisiones que corren el riesgo de parecer impopulares y contrarias a las corrientes de opinión dominante".

Otro de los argumentos para intentar apartar al magistrado fue una reunión que mantuvo el juez con la dirigente de la Organización Tupac Amaru, Milagro Sala, el ex juez español Baltasar Garzón, el diputado nacional Remo Carlotto y el fiscal Jorge Auat, a cargo de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad.

Los defensores consideraron que en esa reunión se manifestó "el interés que tiene el magistrado de 'quedar bien' con la parte querellante, la Procuración General de la Nación, el ex fiscal Pelazzo, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, el ex juez Baltadar Garzón, la dirigente piquetera Milagro Sala y los organismos de Derechos Humanos." «