Por: Hernán Kloosterman.

Mientras el foco informativo todavía se ubica en el final de una buena temporada de verano, Alejandro Rabinovich destaca “la revitalización del debate político en la ciudad”. El coordinador de Gabinete municipal y mano derecha de Guillermo Montenegro, tanto en la campaña como en la gestión, valoró los primeros meses del gobierno municipal.

Ubicó al debate legislativo por el presupuesto en un primer plano. “Faltaba en la ciudad”, remarcó mientras que elogió el rol de la oposición y la homogeneidad del oficialismo.

Mano a mano con LA CAPITAL, el “Ruso” Rabinovich marcó las prioridades de la gestión, aseguró que Montenegro busca escuchar a los vecinos y a los que no piensan igual y resaltó la necesidad de un buen vínculo con Provincia y Nación.

Además, denunció un “estado de abandono” en muchas áreas del municipio, defendió la cantidad de nombramientos políticos y anticipó que los contratos temporarios “se van a revisar”.

– ¿Cómo evalúa los primeros meses de gestión, con la particularidad de que coinciden con la temporada?

– Fue importante para el equipo de gobierno el lazo que se generó en el Concejo Deliberante, en la discusión política. Importante en cuanto a nuestros secretarios escuchando los pedidos de los vecinos de los barrios. E intentando llevar adelante soluciones para los problemas de los vecinos. Es verdad, coincide con la temporada.

– ¿El tratamiento y la aprobación del presupuesto sin mayores sobresaltos fue algo valioso?

– Fue valioso volver a poner las cosas en su lugar. Fue valiosa la discusión política que se dio ahí. Nuestros secretarios estando en el Concejo más de 40 horas explicando. No somos soberbios, ni necios: la mejor solución puede ser de la oposición. En la escucha, se llega a las mejores soluciones. Nadie se ata ni muere por una idea. Si la mejor solución viene de un concejal de la oposición, hay que tomarla. Fue bueno el ordenamiento de las instituciones y fue rico el debate.

– ¿Cómo evalúa el rol de la oposición?

– El debate fue profundo y bueno. El rol de la presidenta de la Comisión de Hacienda fue muy interesante, dándole lugar al oficialismo y a la oposición. Remarco el rol de Virginia Sívori y también el del interbloque nuestro. Trabajaron organizados los tres presidentes de bloque. Era la primera prueba dentro del oficialismo para ver cómo iba a funcionar el interbloque y funcionó como un equipo.

– ¿La unidad en el oficialismo no es un dato menor si se tiene en cuenta que en la gestión anterior hubo muchas grietas?

– Se viene de una gestión con temas que vemos en las distintas áreas. Faltaba en la ciudad el debate político y lo que hizo esto fue revitalizar el debate político, entendiendo el problema de los vecinos. Se discutieron cuestiones que resuelven la vida de los vecinos.

-En algún pasaje del debate, la oposición deslizó que el presupuesto actual es la continuidad del de Arroyo.

– Es parte del argumento político. Nosotros entendemos que de 62 millones que el año pasado se ejecutaron en obras, este año se va a hacer una ejecución cercana a los mil millones. Esas obras tienen un contenido social, son requerimientos de los vecinos y tienen que ver con el espacio público. No alcanza un año de gestión. Se necesitan varios años para llevar a Mar del Plata a ese lugar. Nosotros ponemos todo para escuchar a cada vecino y estar al lado de los pedidos. Trabajamos 20 horas como lo hace Guillermo: el que no trabaja 20 horas por día no puede ser parte de este equipo. El estado de abandono que había en muchos estamentos del Estado requiere mucho tiempo y laburo. Las discusiones políticas para tener un título, que se hizo mucho en los últimos años, llevaron a que muchas veces no estuviese la lupa en lo que verdaderamente importa a los vecinos.

– En el primer desafío legislativo tuvieron el acompañamiento de Acción Marplatense. ¿Es apresurado hablar de un acuerdo legislativo?

– Se planteó una discusión política. Ellos plantearon algunas situaciones, hubo posiciones más duras y otras menos. Acción Marplatense dijo que acompañaba modificando algunas cuestiones. Después el Frente de Todos terminó acompañando, absteniéndose. Del diálogo y del consenso se construye lo mejor.

– ¿Entonces fue algo circunstancial?

– Cada cosa es circunstancial. Es posible que en 20 días, haya un debate donde el mejor planteo lo tenga Acción Marplatense o el Frente de Todos. No es un discurso, es de verdad.

– ¿La actual va a ser una gestión marcada por las obras?

– Esperemos que sí. Vamos a intentar que cada peso de los vecinos llegue a servicios. Sabemos que el presupuesto municipal tiene un límite y se necesita el acompañamiento de Provincia o Nación. Esperamos que nos acompañen y que juntos con el municipio se pueda generar un verdadero cambio para los marplatenses.

– Una de las primeras críticas a la gestión fue la cantidad de nombramientos políticos.

– El Estado estaba sin ningún tipo de control por parte de nadie. Había áreas enteras sin ningún responsable. Para toda la seguridad de General Pueyrredon había una persona a cargo. Nadie sabía que había grúas para levantar a los autos mal estacionados. ¿Por qué? Porque no había un responsable político. Había áreas con abandono. Fortalecimos Desarrollo Social. Mar del Plata tiene las dimensiones y los problemas de la provincia. Hubo un esfuerzo de todos los funcionarios de bajarse el 20% del sueldo. Muchas veces lo que se busca es la crítica fácil. No respondemos. Queremos responder con hechos concretos para los vecinos y que ellos sean los que nos juzguen.

También hay que ver desde dónde nos mide la oposición. Nos mide desde un no gobierno y de un abandono total por parte del Estado. O de un gobierno que más allá de los cargos políticos, le importaba cómo dejaba a 150 personas en planta permanente. Nosotros dijimos el día que asumió Montenegro: funcionario que llega, funcionario que se va al final de la gestión. No pasa a planta, ni él ni nadie de su familia.

– A fin de marzo se vencen muchos contratos de trabajadores temporarios. ¿Qué va a pasar?

– Se están revisando. La idea es hacer una revisión porque no es dinero nuestro, es de los contribuyentes. Entonces, quiero saber si esas personas son necesarias para sus áreas, qué función cumplen, si son las más idóneas o si sólo llegaron por ser amigos de alguien. Hay que evaluarlo y tomar la decisión sin que tiemble el pulso. Si tuvieron algún tipo de acomodo, les agradeceremos mucho los servicios prestados y tendrán que ir a buscar trabajo como, lamentablemente, cientos de marplatenses. Los que hicieron bien su trabajo y rinden se van a quedar.

– De los problemas que se encontraron al asumir, ¿cuál es el más urgente?

– La presencia del Estado, estar cerca de los vecinos. General Pueyrredon es extenso y muchas veces se hace una concentración en donde rinde electoralmente. La prioridad es dejar la especulación electoral. Encontramos la no escucha, el abandono. Se dijo en campaña y lo estamos haciendo: hay que empezar de afuera hacia adentro y hay que escuchar a los vecinos y a las problemáticas de los barrios. Un tema que lo preocupa es el deporte. El estado del “poli”, del estadio, permanentemente se pregunta cómo está eso. Durante muchos años hubo un dejar pasar, total no pasa nada. Va a costar. Va ser un trabajo de varios años y no lo podemos hacer solos. Ya habrá tiempo para la disputa electoral.

– Se termina la temporada. El foco va a estar puesto en…

– Estamos haciendo obras en la escuelas. En el espacio público, en la seguridad y en cuidar a los marplatenses. Fueron nuestros ejes de campaña y son los ejes de gestión. El espacio público, la escuela, los centros de salud. Más que la escuela es la educación. Fue una locura sacarle la bonificación a los docentes.

 

– La seguridad es uno de los ejes de gestión. ¿Cómo evalúa el trabajo en esa área hasta el momento?

– Es un eje central trabajar permanentemente para que el vecino se sienta cuidado. El tema de seguridad es permanente. El delito muta, cambia de lugar y nuestro compromiso es permanente para intentar que el vecino se sienta más seguro. Creemos que estamos trabajando bien con Provincia y Nación.

– El verano transcurrió sin muchos de los conflictos habituales, como el de guardavidas o municipales.

– Nosotros escuchamos a cada sector, pero esto no significa que no haya algún reclamo. Puede llegar a surgir. Montenegro es una persona proclive al diálogo. Con que no haya conflicto con guardavidas o municipales, la beneficiada fue la ciudad, que tuvo un mejor enero y febrero.

— “Trabajar en conjunto con nación y provincia, sin bajar ninguna bandera”

El armado de Juntos por el Cambio luego de la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires y en la Nación fue otro de los temas que tocó Alejandro Rabinovich, aunque aclaró que “será el 2021 el momento de la discusión electoral”.

– ¿Cómo ve la reconfiguración de Juntos por el Cambio a nivel provincial y nacional?

– Nosotros tenemos en claro que tenemos que trabajar para lo que nos eligió la gente que es trabajar por la ciudad, por el espacio público, la seguridad y al lado de cada problema de los vecinos. Ya habrá tiempo para las discusiones electorales Para que le vaya bien a la ciudad, tenemos que trabajar en conjunto con nación y provincia sin bajar ninguna bandera ni renunciar a la cuestión electoral.

Es momento de trabajar todos juntos para que se beneficie el marplatense. Será el 2021 el momento de la discusión electoral. La tendremos y bienvenida sea. No es momento de hablar de cargos, la gente nos eligió hace cuatro meses.

– Conoce muy bien a Montenegro. ¿Cómo lo ve al frente de la intendencia en los primeros meses?

– Muy motivado. Es una persona que fue fiscal federal, juez federal, estuvo al frente del Ministerio de Seguridad, de la ciudad de Buenos Aires. Sabe lo que significa el manejo del Estado, la responsabilidad de gobernar su ciudad. Muchas veces lo veo angustiado por no poder dar una solución pronta a todos los problemas. Lo veo con mucha voluntad, horas de trabajo y sobre todo, escuchando a los vecinos. Y al que no piensa igual. No puede haber una red de gente que le diga: ‘muy bien jefe, lo que usted hace es perfecto’. Por eso está el buen el diálogo con la oposición y con provincia y nación.

— La sorpresa de la temporada

Alejandro Rabinovich admitió que la buena repercusión de la temporada los “sorprendió”. “Nos puso en un lugar interesante en el que se ve cómo trabajando en conjunto con provincia y nación, se pueden llevar las cosas adelante. Un ejemplo: la seguridad es un tema en que el municipio puede estar al frente de las cámaras de control. A la policía la maneja la provincia y hay fuerzas federales. La relación entre los tres estados hace que Mar del Plata tenga mayor seguridad. Cuando se pone por delante el bienestar para todos y no las cuestiones políticas, las cosas salen bien”, argumentó.

Además, consideró que “la temporada es una oportunidad para que tenga más trabajo el marplatense”. “Además de eso, no me gusta hablar de la temporada. Por las características que tiene, Mar del Plata todo el año es una temporada. Tiene que ser la ciudad de los congresos, de los eventos, de las vacaciones de invierno, del fin de semana largo. Tiene para dar tanto que no está bueno hablar sólo de la temporada”, consideró.