La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, promulgó la ley 14.897 a partir de la cual se determinó que los transportes públicos de pasajeros bonaerenses y municipales tendrán que poseer cámaras de seguridad que registren en tiempo real lo que acontence en el interior de los vehículos y que guarde las imágenes para "prevenir episodios de violencia a bordo".

Según lo que se publicó en el Boletín Oficial este miércoles, la ley permitirá aportar pruebas que servirán para "investigaciones judiciales o juzgamientos de causas penales" y tiene por objetivo "prevenir episodios de violencia a bordo".

Paralelamente, el escrito establece que los gastos de compra de los equipos de seguridad así también como su instalación correrán por cuenta de las empresas, lo que promedia en cinco mil pesos (cuatro cámaras, monitor y mecanismo de grabación digital).

Al mismo tiempo, la ley, en el artículo 3º, establece que "la existencia de videocámaras debe informarse mediante un cartel indicativo de manera clara y permanente tanto en el exterior como en el interior de la unidad".

Finalmente, el documento determina que las imágenes que se obtienen en estas grabaciones, "tienen carácter absolutamente confidencial" y que "solo podrán ser requeridas por la autoridad pública y/o judicial que se encuentre avocada a la investigación o al juzgamiento de causas penales o contravencionales".