Pese a que el inconveniente no generó problemas en la red doméstica del servicio, sí causó estragos en las instalaciones deportivas que tiene la casa de altos estudios en la zona de bardas. La cancha de rugby quedó sumergida bajo una gran laguna de barro rojo, mientas que el agua ingresó al salón que tiene la UNCo en ese predio.

El operativo de refacción del EPAS se produjo el lunes por la tarde, pero los daños generados por la gran cantidad de agua aún podían observarse durante toda la jornada del martes.

Un socavón de grandes dimensiones dejó una parte del caño al desnudo, dando cuenta de los estragos que hizo el agua en toda esa zona arenosa de la barda neuquina.

Afortunadamente, los técnicos del EPAS lograron la reparación del ducto durante el lunes, por lo que el servicio volvió a la normalidad a las pocas horas.

La zona prácticamente no tiene tránsito ya que sólo hay algunas huellas desdibujadas y senderos que bordean las bardas y los cañadones.

No obstante, el lugar es muy utilizado para los amantes de la actividad física, el trekking y el bicicross. Fueron algunos de estos deportistas los que comenzaron a dar cuenta del problema a través de numerosas fotos que subieron a través de las redes sociales.

Por suerte, el problema no pasó a mayores, aunque ayer el enorme pozo seguía igual que cuando sufrió la pérdida de agua.