El Gobierno sacó a relucir toda la artillería pesada que considera como logros de la gestión cuando restan dos semanas para las elecciones legislativas. Uno de los ejes que planteó el equipo de campaña que encabeza el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, fue salir a defender los resultados logrados en un año y medio de mandato de Alberto Fernández.

La agenda discursiva del oficialismo apuntó a la defensa de las medidas económicas tomadas en el medio de la pandemia, y en proyectar lo que será la post pandemia. En estos momentos se piensa en mejorar el bolsillo de los trabajadores que se vieron afectados por la inflación.

Ante ello se tomaron una serie de medidas tendientes a mejorar el poder adquisitivo de las clases bajas y medias con el fin de reconquistar al electorado enojado por las medidas de la cuarentena. “Si las paritarias acompañan, no es tan grave inflación”, prometen desde un sector del Gobierno.

El análisis que hacen internamente apunta a que la clase media se vio beneficiada con cierto alivio por los cambios en el Impuesto a las Ganancias a través de un proyecto de ley aprobado en el Congreso y promulgado por el Presidente. También destacan la reapertura de las paritarias de casi todos los sectores con el objetivo que “los salarios no pierdan ante la inflación”.

Créditos a tasa cero, Ahora 30 y Previaje

El consumo será vital en la agenda de reactivación que planifica el Gobierno. Se lanzaron nuevos incentivos con el programa Ahora 12, que amplió el beneficio hasta 30 cuotas en algunos productos.  Lo mismo con el plan de turismo de Previaje que permitirá un reintegro de hasta de 50 por ciento para las compras de pasajes, hoteles, gastronomía y paquetes turísticos.

Dentro el mismo sector social, uno de los últimos anuncios fue para los 1,5 millones de monotributistas que fueron habilitados desde el viernes a sacar créditos de hasta 150.000 pesos a tasa cero, con un repago de 6 meses de gracia y hasta 12 cuotas sin intereses.

Para las Pymes, se pusieron en marcha 29 líneas de financiamiento con un presupuesto que supera los 220 mil millones de pesos destinados a fomentar el desarrollo productivo, en especial a la transformación digital, y con el objetivo de generar empleo a través del programa “Te Sumo”, orientado a la contratación de jóvenes por parte de las empresas que a cambio serán beneficiadas con una reducción en aportes patronales y un apoyo económico del Estado que cubre el pago de hasta un 70 por ciento del salario durante 12 meses.

Disputar los votos del centro

Un sector del Gobierno apuntalará el discurso dirigido a la clase media para “disputar los votos de centro y potenciar al Frente de Todos”, reconocen fuentes oficiales. Ese punto consideran que fue instrumentado desde el Congreso “generando medidas de alivio a trabadores, como ganancias y el monotributo”, y para incentivar “al sistema productivo”.

Las clase bajas, en especial, verán una recomposición con el bono a los jubilados y pensionados con el fin de aliviar el segundo semestre del año; además de los aumentos en la tarjeta Alimentar para las familias que cobran Pensiones No Contributivas y tengan hijos de hasta 14 años. Los montos de ayuda alimentaria crecieron hasta los 12 mil pesos para aquellos que tengan tres o más hijos.

A esas medidas suman que “las tarifas de los servicios están planchadas”, además de la recomposición de las fórmulas de haberes de la AUH y las jubilaciones que subirán 12 por ciento desde el 1° de septiembre por la aplicación de la fórmula de movilidad.

“Alivio económico”, es la frase que repiten en el Ejecutivo como premisa de la campaña electoral.  Uno de los pilares implementados durante la pandemia fueron los ATP (Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción), como herramienta creada para morigerar el impacto de la crisis en las empresas. “En 2015, teníamos un salario promedio de 800 dólares y ahora estamos en 250”, analizan sobre la situación salarial.

La situación de la crisis social preocupa al Gobierno, sobre todo por la expansión de los planes sociales. Desde el Parlamento se trabaja en un proyecto del Ley que impulsa el diputado Sergio Massa para generar trabajo genuino, según adelantaron fuentes legislativas. La iniciativa plantea que las empresas den empleo a cambio de que sean beneficiadas por bajas en los impuestos. Aún el texto no tiene una forma definitiva, ni tampoco confirmación de que fuera aprobado por el Ejecutivo, incluso por el ministerio de Desarrollo Social.

“Transformar planes de empleo en trabajo genuino, como el plan de promoción del empleo registrado para 250 mil trabajadores rurales”, describen dentro del Gabinete como línea principal de la gestión para la salida de la pandemia. Uno de los pilares es que la economía popular genere el desarrollo de las economías regionales y creación de empleo. La administración de Alberto Fernández sostiene hoy un millón de planes sociales que se incrementaron debido al avance del Covid. Actualmente cobran 13.600 pesos, que es la mitad del Salario Mínimo Vital y Móvil, que hoy está en $27.300. El gobierno de Mauricio Macri había dejado 560 mil planes en diciembre de 2019.

“El debate durante y pos elecciones va a girar en torno a los planes y las organizaciones sociales”, afirman en el FDT. La problemática de los cortes de calles de los movimientos sociales lo adjudican a una presión por “las elecciones, la situación económica y el bajón de la pandemia”. También apuntan a un sector de la izquierda que “marcha en modo campaña”.