Núñez Carmona buscó intervenir ante la AFIP para beneficiar a Ciccone

Núñez Carmona buscó intervenir ante la AFIP para beneficiar a Ciccone

El socio del vicepresidente Amado Boudou,José María Núñez Carmona, se involucró en la resurrección de la ex Ciccone Calcográfica y buscó "excepciones" que le permitieran a la AFIP concederle a la imprenta una moratoria con una quita multimillonaria de intereses y multas que está prohibida por ley.

Núñez Carmona mantuvo para eso una reunión en "Della Rocca-Almarza-Piazza", el estudio contable que lleva algunas cuentas del Banco Macro y de la cooperativa -una financiera encubierta- que aportó $ 29 millones para resucitar la ex Ciccone.

Núñez Carmona concurrió al estudio junto con el presidente de The Old Fund, Alejandro Vandenbroele. De inmediato quedó claro que no se trataba de un encuentro social. Le preguntó a uno de los socios de la firma, Alejandro Almarza, por qué la AFIP no le podía condonar los intereses a la ex Ciccone. Y algo más: "Nariga" preguntó si había "excepciones" a la veda legal.

El encuentro con Almarza -síndico titular del Banco Macro y de otras seis firmas del Grupo Macro- ocurrió a fines de 2011, mientras Boudou se aprestaba a asumir como vicepresidente y sólo tres meses antes de que estallara el escándalo que provocó la apertura de la causa penal que terminó en junio de este año con su procesamiento por supuesta corrupción.

Los esfuerzos de Núñez Carmona por ayudar a la ex Ciccone a sortear los escollos legales con la AFIP no prosperaron. Pero los esfuerzos resurgieron sólo unas semanas después, según afirmó el juez federal Ariel Lijo al procesarlos.

"Una vez que Boudou fue elegido vicepresidente", escribió Lijo, la ex Ciccone, "a través de Vandenbroele, solicitó un nuevo plan de pagos ante la AFIP, que fue aprobado el 25 de noviembre de 2011 y desembocó en la concesión del certificado fiscal para contratar con el Estado, el 13 de diciembre de 2011. Es decir, tres días después de que Boudou asumiera como vicepresidente".

Boudou niega todas las acusaciones. Al apelar ante la Cámara Federal, sostuvo que el juez Lijo se basó en "falsedades", "errores", "omisiones" y "trascendidos periodísticos" para procesarlo.

Sin embargo, la reunión del socio de Boudou en el estudio Della Rocca aporta un nuevo indicio sobre el rol de Núñez Carmona en el caso Ciccone, aunque los esfuerzos por resucitar la imprenta incluyeron otros encuentros en ese estudio con otros protagonistas de la trama Ciccone, según los testimonios de cuatro fuentes y documentos públicos y privados que obtuvo LA NACION durante dos meses.

Una de esas reuniones adicionales en el estudio Della Rocca ocurrió meses después de la visita de Núñez Carmona. Incluyó al mismo socio del estudio, Almarza; al yerno de Nicolás Ciccone, Guillermo Reinwick, y a su amigo y dueño de Swiss Medical Group, Claudio Belocopitt.

El objetivo de esa reunión, que se organizó después de que estalló el escándalo, fue completar el armado societario y financiero que permitiera disipar las sospechas que se cernían sobre Boudou y sobre el dueño del Macro, Jorge Brito, y su hijo, también Jorge. La meta fue ubicar a Raúl Moneta como rostro de la operación. Esa segunda reunión registró varios momentos tensos. El primero, cuando Belocopitt calificó de "mamarracho" los registros contables de The Old Fund, incluido el ingreso de $ 7,6 millones del gobierno de Formosa, cuya responsabilidad Vandenbroele pretendía transferir a Reinwick.

El segundo cortocircuito fue también el último. Ocurrió cuando Belocopitt se dirigió a Almarza -con quien en su primer encuentro, 20 años antes, casi termina a las trompadas-, y le preguntó: "¿Vos le darías a firmar esto a tu hijo?". Y Almarza optó por retirarse de la sala, mientras el dueño de Swiss Medical insultaba a Vandenbroele.

Según las defensas de Boudou, Núñez Carmona y de Vandenbroele, la "ruta del dinero" detrás de The Old Fund y de la ex Ciccone termina en Moneta, quien afronta serios problemas de salud que le impedirán declarar ante la Justicia. Mientras tanto, en sus escritos judiciales y ante la prensa, el vicepresidente evita incluso mencionar el apellido Brito como parte de la financiación.

Al apelar su procesamiento, en cambio, Boudou sí buscó despegar su suerte de la de Núñez Carmona, al que testigos, imputados, llamadas telefónicas y otras pruebas lo comprometen. "La relación de amistad que me une con él no podrá jamás ser indicio de mi participación en todo cuanto participe o realice aquél", argumentó el vicepresidente.

"FIRMÁ, PORQUE NO SALÍS"

La tercera reunión en el estudio Della Rocca -uno de los más conocidos de la City porteña para temas financieros, con trabajos para Moneta y los Brito- también tuvo a Vandenbroele y a Reinwick como protagonistas. Esta vez fue sin Belocopitt, pero sí junto a un supuesto abogado del Macro.

Reinwick aportó pocos detalles a la Justicia sobre esa reunión, del 13 de junio de 2012, cuando el escándalo ya llevaba cuatro meses en los diarios. Al declarar ante el juez Lijo, el yerno de Ciccone afirmó que Vandenbroele lo urgió a firmar unos papeles. También declaró que Vandenbroele le pasó su teléfono con una llamada. Del otro lado, según Reinwick, lo apretó Núñez Carmona. "Firmá, porque no salís", lo habría conminado.

Ante Lijo, Reinwick detalló además que en esa reunión con Vandenbroele también participó "un escribano Anaya o Amaya". Se trata del notario Emerio Ramón Tenreyro Anaya, según reconstruyó LA NACION.

Conocidos desde los años en que Vandenbroele trabajó en el estudio Alfaro Abogados, Tenreyro Anaya certificó las firmas que Reinwick y Vandenbroele estamparon en un "preacuerdo de prestación de servicios". Así lo asentó en el folio 062 del Libro de Requerimientos de la escribanía Maciel, en la que trabaja.

Para eso, Tenreyro Anaya debió esperar más de una hora fuera de una sala de reuniones del estudio Della Rocca, en la calle 25 de Mayo al 400, por orden del supuesto abogado del Macro. No deseaban que escuchara lo que ocurría del otro lado de la puerta.

En efecto, cuando ya había sido apartado el primer juez de la causa, Daniel Rafecas, y renunciado el procurador general de la República, Esteban Righi, el escribano habría escuchado la conversación telefónica entre Reinwick y Núñez Carmona. Según el yerno de Ciccone, el socio de Boudou le dijo que si no firmaba, ponía "en riesgo el país".

TRES REUNIONES SIGNIFICATIVAS

Fueron en el estudio que lleva las cuentas de Brito y Moneta

Fines de 2011

Núñez Carmona y Vandenbroele asistieron al estudio Della Rocca-Almarza-Piazza, para intentar sortear los escollos legales de la imprenta con la AFIP.

Principios de 2012

El objetivo en esta instancia era ubicar a Raúl Moneta como rostro de la operación y eliminar las sospechas sobre Boudou y Brito.

Junio de 2012

Guillermo Reinwick (yerno de Ciccone) declaró que Núñez Carmona lo amenazó para que firme unos papeles: "Firmá, porque no salís"..

Comentá la nota