Máximo Kirchner empezó el operativo clamor, pero Cristina sabe que si no va pierde todo en 2023

Máximo Kirchner empezó el operativo clamor, pero Cristina sabe que si no va pierde todo en 2023

La vicepresidenta está en una brutal disyuntiva. Ante el fracaso del experimento Alberto Fernández presidente, ahora debe decidir si va ella personalmente o poner a alguien con decisión propia, como Sergio Massa. Y Massa, para conducir, debe confrontarla. ¿Preferirá replegarse hasta 2023?...

ALEJANDRO CANCELARE

Mientras que los organizadores de su última presentación en La Plata ya anuncian una nueva puesta en escena con Cristina Fernández de Kirchner en el Gran Buenos Aires, lo cual deja en claro su decisión no sólo de ordenar y de incidir, sino de medir hasta dónde pueden llegar sus posibilidades electorales, el intendente de Ensenada, Mario Secco, cree que ella le hará caso al “pueblo que le empezó a pedir Cristina Presidenta”.

“Cristina escuchó al pueblo pedir, desde abajo, Cristina Presidenta. No lo inventé yo sino la gente. No escucho a nadie diciendo Macri presidente, con lo cual, hay un horizonte por el que tenemos que trabajar”, expresó el intendente de Ensenada, un ferviente defensor del kirchnerismo más extremo.

En diálogo en Radios Provincia, Secco, quien desde el año pasado ya viene insistiendo con esta postura, consideró que “ella está activada, como siempre. Ella está arriba y todos nosotros somos una cuestión secundaria para el pueblo argentino.

PUBLICIDAD 

 

Hay, en sus apreciaciones, algunos giros que marcan claramente lo que buena parte del peronismo disfruta y agradece. Una conducción. El que ella esté “arriba” y el pueblo “abajo” lo deja más que claro, al menos para Secco, quien calificó a la vicepresidenta como “la única persona del lado de la distribución de la riqueza y la justicia social que quiere la gente”.

“Del lado de enfrente no está sólo Macri y su pandilla, es el poder real, están los formadores de precios, los que manejan los medios de comunicación masiva, los dueños de los bancos, Comodoro Py jugando partidariamente sus pulseadas”, enfatizó Secco y añadió: “está claro que los que estamos de este lado tenemos que consolidar el espacio para volver a gobernar”.

Para muchos de los participantes del encuentro de la semana pasada en La Plata, en la que CFK cenó con un intendentes y ministros de poder territorial del Gran Buenos Aires, según reconstruyó MDZ con diálogos directos o a través de personas de su máxima confianza, “Cristina está en una gran encrucijada”.

“No puede ganar una elección. Tampoco puede presentarse su hijo. Entonces, pretende ser la parte más fuerte para reacomodar el Frente de Todos, pero después del fracaso de elegir como presidente a un operador político y no a un conductor político, advirtió que debe cambiar radicalmente su representante, si delega la candidatura”, fue una de las conclusiones que quedó de una larga sobremesa.

Para un importante operador que dialoga con buena parte del poder nacional y territorial, inclusive de La Cámpora, “con el olfato que la caracteriza, la próxima ella va a tener que elegir a alguien que no solo pueda gobernar, sino que además pueda conducir”.

La disyuntiva la obliga a ser candidata directamente porque “también ya sabe, por la experiencia de la que fue coprotagonista con Néstor, que un líder que quiere ser rey, no tiene alternativa que matar al monarca en ejercicio. Pareciera que las opciones son: o la mata un peronista o la mata un antiperonista en caso que ella no quiera presentarse para presidenta”.

Comentá la nota