La película entusiasma, a pesar de que la foto compone un cuadro pesimista, lleno de tonos indefinidos. En la nueva campaña, los suelos de mejor clase al norte de Jesús María están a punto de abandonar el virtuoso “50 y 50” de los años recientes, donde creció fuerte la producción de maíz. Decididamente, según los productores, los números no cierran.

Es la mala foto de la coyuntura que, sin embargo, no alcanza para obnubilar la ambición de quienes tienen en foco la tendencia, la película, la idea de un desarrollo territorial y agroindustrial con el maíz como protagonista destacado.

La radicación de un Bio-Norte, en la intersección de las rutas 9 norte y 60, resultado de una asociación de productores para industrializar bioetanol con un modelo similar a Bio4 –el proyecto riocuartense– es una de las ideas que, por ahora, ha quedado en carpeta. En otras actividades se avanzó: feedlots de bovinos, granjas avícolas y de porcinos, procesos de transformación como los de Pronor: alimentos balanceados, producción porcina, harinas proteicas de soja. Como potencial, la producción de energía a base de aceites vegetales.

Valor social

“No nos unió el espanto esta vez, a pesar de que estamos con dificultades extremadamente serias para la comercialización. Estamos pensando hacia 2020 como un valor social para generar desarrollo y puestos de trabajo en un norte que viene postergado”, definió ante La Voz del Campo Atilio Carignano, presidente de la Sociedad Rural de Jesús María. La entidad transita su semana más relevante: hasta el domingo tendrá abiertas las puertas de su 67ª Exposición de Ganadería, Industria y Comercio, una de las de mayor prestigio en el país.

Con la meta de aglutinar a productores y consumidores de la cadena del maíz y definir soluciones y estrategias a escala regional, la Rural de Jesús María junto con el Ministerio de Agricultura de la Provincia y la Bolsa de Cereales de Córdoba convocó a un foro que mañana presentará sus conclusiones, durante el acto oficial de la exposición.

Opción regional

Por la distancia a los puertos, en el norte cordobés no hay muchas opciones: agregar valor, transformar granos en carne, subproductos y energía. Y a eso apuntan quienes lideran este debate.

Aún está en paréntesis el proyecto de ubicar un puerto seco, una central de transferencia de granos y derivados en Las Arrias, sobre la línea ferroviaria del Nuevo Central Argentino. El de Bio-Norte, más reciente, contaría con energía y gas suficientes para su instalación, pero por ahora está stand by .

“La Rural está motivada en todas las escalas; desde esta tan soñada como un Bio-Norte, hasta encontrar alternativas para el pequeño productor, como la ganadería ovina para obtener corderos en la costa del río Dulce”, dice Carignano.

En un intercambio promovido por La Voz del Campo , ofrecieron su visión Pablo Quijada, de la firma Quijada Agropecuaria; Alejandro Agüero, de Pronor; Luis Picat, del frigorífico de porcinos Qualitá; Carlos Arnold, asesor técnico de la Sociedad Rural de Jesús María y los ganaderos Carlos Ilari y Walter Orodá.

Modelo porcino

Picat citó tres factores determinantes de la opción por el maíz y su cadena en la región: la condición climática, que potencia al cultivo; la salida del esquema de arrendamientos (ante la imposibilidad de que el dueño de la tierra tome riesgos, la decisión fue tomar riesgo propio e ingresar en las ramas avícola y porcina); y el tercer factor es el costo de los fletes por distancia a puerto.

Con una faena mensual de 6.500 cabezas, Qualitá se provee con un 30 por ciento de producción propia de cerdos; abastece a industrias de fiambres y embutidos y al consumo en fresco, y comenzó a exportar menudencias a Hong Kong. Por otra cuerda, se sumó a la integración de BRF (Brasil Foods), propietario de Avex, a la que provee huevos fértiles de los que nacen los pollos parrilleros.

“Es el esquema para seguir creciendo; el productor agropecuario se tiene que integrar en diferentes modelos: en cerdos tenemos como ejemplo a Brasil; las integraciones se pueden hacer desde los reproductores, la terminación, el frigorífico, como hizo Aprocer en Oncativo. Los productores chicos deberían integrarse”, recomienda Picat. Su visión es que el norte de Córdoba debe transformarse en uncluster porcino y alcanzar un punto de equilibrio entre el abastecimiento de consumo interno y exportaciones.

La Argentina tiene 400 mil madres en producción versus 3,5 millones de madres en Brasil. Impositivamente, hay una asimetría con un IVA de 21 por ciento para carne porcina y del 10,5 por ciento para la bovina.

Lo que ya se logró

Con manejos agronómicos y tecnologías se logró estabilizar los rendimientos del maíz, lo que permitió dar sustento a los sistemas agrícolas en la región, destacó el ingeniero agrónomo Carlos Arnold. A partir de allí, los productores comenzaron a poner la lupa en el flanco de la demanda y en los procesos de agregación de valor. “La Rural pretende instalar el tema y que no sea sólo dentro de un análisis coyuntural, sino como un sistema en el mediano y largo plazo”, indicó.

Con el desplome de los precios del maíz, las empresas que tienen una estructura más diversificada son las que pueden sortear mejor la coyuntura, dice Arnold desde su posición de asesor del Crea Sierras Chicas. Con esta idea, se apunta a que las empresas tengan planteos diversificados de agregado de valor y de integración.

Lo que surgió de la convención convocada por la Rural es que es necesario “pensar a nivel de cadena” y generar políticas público-privadas que permitan su desarrollo.

Alejandro Agüero, de Pronor, mencionó la matriz energética entre las alternativas para la región, asociada al déficit en este rubro. “Y no porque hoy el flete incide con el 30-35 por ciento del precio del maíz salgamos a buscar qué hacer; tiene que ser una política de largo plazo; no es la disyuntiva energía o comida, sino comida y energía”, acotó.

Con el aceite de soja, Pronor evalúa producir energía eléctrica en lugar de biodiésel, por cuanto el número económico cerraría tomando en cuenta los bajos precios internacionales del aceite de soja. En este caso, una debilidad, como lo es el déficit de energía, puede convertirse en una fortaleza y una oportunidad para el maíz, razona Agüero.

Vaso medio vacío

Los productores y proveedores netos de maíz miran con seria preocupación el escenario de corto plazo. Pablo Quijada, de la firma Quijada Agropecuaria, recordó que los productores más tecnificados venían haciendo en el norte de Córdoba una rotación de 50 por ciento de maíz y 50 de soja. “Este año, con una cosecha récord nunca vista en la historia, las empresas que apostamos al maíz vamos a perder plata. Esta ya es una alerta roja. Lamentablemente, con retenciones del 20 por ciento, con saldos técnicos que se van acrecentando, fletes que impactan en un 40 por ciento de los valores actuales, saldos de IVA que no se recuperan, estamos en un atolladero y sin salida. Empresas como la nuestra van a reducir al mínimo este año la siembra de maíz”, alertó Quijada.

Desde la vereda ganadera, Walter Orodá se mostró preocupado de que se reduzca la siembra de maíz, pese a que la coyuntura de precios favorece a la producción de carnes. “Que haya productores trabajando a pérdida no es sustentable”, dijo.

Su colega Carlos Ilari diferenció entre empresas y campos mixtos. “Un campo agrícola tiene que seguir siendo agrícola; no necesariamente un sistema ganadero se tiene que hacer en el mismo sitio”, mencionó.

Miradas

Luis Picat (Frigorífico Qualitá). “Los productores chicos deberían integrarse, es el esquema para seguir creciendo. En cerdos, las integraciones se pueden hacer desde los reproductores, la terminación, el frigorífico, como hizo Aprocer en Oncativo”.

A. Agüero (Pronor). “No porque hoy el flete incide con el 30-35% del precio salgamos a buscar qué hacer; tiene que ser una política de largo plazo, que permita generar más empleos. Y no es la disyuntiva energía o comida, sino comida y energía”.

Carlos Arnold (Asesor técnico). “Con manejos agronómicos y tecnologías se logró estabilizar los rendimientos del maíz. Si salimos de la coyuntura y pensamos en el largo plazo, lo que tenemos que lograr es que todas las empresas tengan planteos diversificados de agregado de valor y de integración”.

Pablo Quijada (Quijada Agropecuaria). “Este año, con una cosecha récord nunca vista en la historia, las empresas que apostamos al maíz vamos a perder plata. Esta ya es una alerta roja. Estamos en un atolladero y sin salida. Empresas como la nuestra van a reducir al mínimo la siembra de maíz”.

Agenda

Documento de trabajo. El Ministerio de Agricultura de la Provincia, junto con la Sociedad Rural de Jesús María, la Bolsa de Cereales de Córdoba y otras instituciones del sector darán a conocer mañana, en el marco de la 67ª Exposición Rural de Jesús María, un documento de trabajo titulado: “Visión 2020, cultivo y negocio del maíz en el norte de Córdoba; oportunidades y valor social”.

Foco. El trabajo concentra un diagnóstico Foda (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas), y un resumen de líneas estratégicas y acciones público-privadas con el propósito de incrementar la superficie y revalorizar la cadena del cultivo a escala regional.