El ex presidente Mauricio Macri regresó hoy al país desde Suiza, luego de permanecer 43 días en Europa, cuando sólo faltan cinco semanas para las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Una vez que cumpla el aislamiento preventivo correspondiente, espera sumarse a la campaña electoral de PRO con algunas esporádicas actividades en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, de cara a las internas de Juntos por el Cambio. 

La llegada de quien supo liderar sin mayores cuestionamientos a PRO hasta octubre de 2019 no modificó demasiado la hoja de ruta del precandidato a diputado nacional en territorio bonaerense, Diego Santilli; así como tampoco alteró los planes de María Eugenia Vidal en la Ciudad. Lo cierto es que hasta aquí tuvo poca intervención en los debates que se dieron al interior del espacio, más allá de algunos zoom y llamadas telefónicas con el fin de garantizar la incorporación de un puñado de dirigentes de su riñón durante el cierre de listas.

Luego de que el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, logró desplazarlo de la escena pública con el corrimiento de la titular de PRO, Patricia Bullrich, de la lista porteña; sumado a que Vidal desoyó su pedido para que diera la disputa electoral en la provincia de Buenos Aires, el ex mandatario se limitó a analizar a la distancia el porvenir de la coalición que construyó en 2015 junto a la dirigente de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, y el referente radical Ernesto Sanz. 

La imposibilidad de Macri para regresar a la Argentina debido a las restricciones en el cupo de ingreso de pasajeros dispuesto por el Ejecutivo nacional se transformó en el caballito de batalla de Juntos por el Cambio en esta campaña. Su vuelta al país, donde deberá cumplir el aislamiento obligatorio, fue recibida con menos entusiasmo del que esperaba. Por ahora, no está en la agenda de Santilli, que por estos días está dedicado a los recorridos proselitistas por diferentes localidades bonaerenses, acompañado por intendentes, Carrió, Bullrich y Rodríguez Larreta.

Cerca del entorno del vicejefe de Gobierno porteño señalaron que "la campaña de Diego está ordenada, planificada y organizada", aunque no descartaron que el ex presidente se sume en algún momento a las recorridas. 

En la Ciudad, dan por descontado que Macri será parte de la campaña que lleva adelante Vidal. "Alguna actividad hará seguro, como hace (Martín) Lousteau, Horacio, Carrió", dijeron fuentes allegadas a la ex gobernadora bonaerense, sacándole peso a la figura del ex jefe de Estado, sin embargo aclararon que "cuantos más dirigentes de distintos estratos estén con María Eugenia mucho mejor". 

Según calculan quienes trabajan en la campaña de Vidal, entre las tres listas que competirán dentro de Juntos por el Cambio en territorio porteño -la que encabeza la ex mandataria provincial, la del ex ministro de Economía de la Alianza Ricardo López Murphy y la que preside el ex ministro de Salud Adolfo Rubinstein- alcanzarán entre 48 y 49 puntos en las PASO. 

En el radicalismo respiran aliviados por no tener que lidiar con el ex mandatario, al menos en esta instancia. "Macri es un tema de PRO", remarcaron desde la UCR. El propio Facundo Manes, precandidato a diputado nacional por ese partido en la provincia de Buenos Aires, se desmarcó en varias oportunidades del gobierno de Cambiemos. Otra historia será si le toca acompañar después del 12 de septiembre.  

Por Gabriela Vulcano