En la Legislatura se cortó la luz cuando reclamaban mejoras edilicias para las escuelas

En la Legislatura se cortó la luz cuando reclamaban mejoras edilicias para las escuelas

La ministra de Educación fue a explicar el Presupuesto y se le quejaron hasta por el exceso de palomas en las aulas.

La ministra de Educación, Soledad Acuña, se presento esta mañana en la Legislatura porteña para brindar detalles sobre el presupuesto presentado para su cartera.

Una cuadra de cola había, minutos antes de las 10 de la mañana, queriendo entrar a presenciar la reunión de la comisión de Presupuesto donde se encontraba Acuña. Tanta fue la convocatoria que debieron abrir el salón continuo al Salón Montevideo donde se estaba llevando a cabo.

La presentación del presupuesto de Educación fue el más polémico de los que ocurrieron al día de hoy, pero no solamente por el reclamo de la oposición que dice que el presupuesto “bajó drasticamente” como dijo Máximiliano Ferraro de la Coalición Cívica, si no que además pedidos de silencio reiterados, interrupciones y hasta un apagón colmaron el Montevideo de tensión.

La explicación de la ministra comenzó definiendo que "El presupuesto de educación entre los años 2007 y el que proponemos en 2017 ha tenido un crecimiento en la inversión real del 23% y eso se ve reflejado en cosas como el salario docente de un mínimo de $11.300, en infraestructura”, además agregó, “proponemos aumentar el doble en mantenimiento y en la construcción de 30 nuevas unidades".

La funcionaria enfatizó la incorporación de nuevas tecnologías "con lo que llegaremos a más de 300.000 PC en las escuelas primarias con soporte, mantenimiento y conectividad y a más de 2.000 docentes primarios en 980 puntos". Respecto al cuidado del medio ambiente se "continuará el programa "Escuelas Verdes" con el que hemos logrado que 478 establecimientos estatales tengan huertas, equipadas para la separación de residuos en origen y 3.000 docentes capacitados". Además, informó: "invertiremos más de $ 7 millones en libros, particularmente en textos de idiomas, sobre todo inglés, aspecto que desde el año 2008 al 2016 destinamos $ 200 millones".

Asimismo, presentó cinco ejes estratégicos en los que mostró logros del corriente año y objetivos para el venidero: mejorar la educación educativa, asegurar la equidad educativa, orientar hacía el futuro, ciudad educadora y la sustentabilidad del sistema educativo.

Concluida la exposición, legisladores de la oposición solicitaron aclaraciones y otros realizaron preguntas respecto a la caída en el promedio de inversiones educativas en general que "en 2008 era del 25% y en 2017 baja al 21%", en particular a las inversiones en infraestructura, baja de un 50% en las partidas de becas, del 7% en educación técnica y del 3% a la dirección general de educación estatal. Otros temas fueron la violencia de género y la prevención de las adicciones. El nivel de los salarios docentes por debajo de los $12.000 básicos y las negociaciones paritarias fueron también preocupaciones expuestas. Sobre las paritarias del año próximo la ministra adelantó "que no tenemos techo".

Ese fue el momento en el que aparecieron las chicanas y las discusiones entre los legisladores. La más picante fue la diputada del FpV y vicepresidenta de la comisión de Educación, cuando se extendió mucho más de cinco minutos (el tiempo que se le asigna a cada uno) y Alejandro García, presidente de la comisión de Presupuesto que dirigía la reunión tuvo que pedirle reiteradas veces que finalice y no lo hacía. “Le pido perdón a los colegas que pidieron la palabra” dijo García, por lo que Pokoik chicaneó “Y yo le pido perdón a los miembros de la comunidad educativa por no poder terminar de decir sus preocupaciones”.

El clima ya era lo suficientemente tenso cuando Gustavo Vera, de Bien Común agarró el micrófono. El legislador que suele ir al frente con temas controversiales como la trata de personas no titubeo cuando le preguntó a la ministra por la plaga de palomas que hay en algunas clases de la Ciudad de Buenos Aires y por las condiciones edilicias de las escuelas públicas. Sin embargo, el amigo del Papa fue interrumpido por un apagón que dejó a oscuras la Legislatura porteña por 20 minutos y sorprendió a todos por el ruido que hubo cuando ocurrió.

Es la décima vez consecutiva que Acuña participa del tratamiento presupuestario de la ciudad, dado que primero lo hizo como diputada, luego como subsecretaria de los ministerios de Desarrollo Social y después de Educación y por hoy por primera vez en calidad de ministra. Esta vez, debió ser interrumpida y apurada para concluir por la falta de tiempo que generó la extensión de los diputados a la hora de preguntar y el corte de luz.

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