Intendentes bonaerenses en estado de alerta: Gran preocupación entre opositores y oficialistas por la suba de contagios

En medio de la evaluación de nuevas medidas de cuidado, jefes comunales del AMBA expresaron temor por el incremento de casos y la ocupación de camas.

En la última semana, los contagios de coronavirus volvieron a aumentar en la provincia de Buenos Aires, donde se registró el pico máximo desde el comienzo de la pandemia con un promedio de 6 mil casos diarios. De ese total, la mayoría de las personas infectadas residen en el AMBA y los intendentes de la región expresan preocupación por la capacidad del sistema sanitario.

A pesar de los feriados de Semana Santa, momento en el que la carga de datos suele demorarse, se contabilizaron 5.160 contagios en el Conurbano durante los últimos días. Cabe señalar, que la semana anterior habían sido 3.450. Estos números y la velocidad de crecimiento, despertaron la preocupación de las autoridades que miran con temor el nivel de ocupación de camas.

“El aumento de casos de Covid y la ocupación de camas se acelera día a día. Es imprescindible bajar la circulación viral mientras se vacunan los grupos de mayor riesgo. La vacuna baja enormemente la mortalidad, pero hay que evitar ya que el sistema de salud se sature”, escribió el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, en su cuenta de Twitter.

En esa misma línea, se expresaron varios intendentes del AMBA. Lucas Ghi, intendente de Morón, aseguró que la situación en su municipio “es delicada por el incremento vertiginoso de casos que tuvimos en la última semana, donde también vemos un aumento de la positividad y un impacto que se empieza a ver en el sistema sanitario".

"Lo más preocupante es que esto ha impactado en el sistema de atención crítica, es decir, en las camas de terapia intensiva que son el cuello de botella cuya capacidad ampliamos el año pasado; vamos a procurar que este año suceda lo mismo, pero este incremento enciende todas las alarmas", agregó.

Su par de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, remarcó que “a diferencia del año pasado, esta segunda ola nos encuentra muchísimo mejor preparados”, respecto de la situación del sistema sanitario pero admitió que deben tomarse nuevas medidas restrictivas para limitar la circulación del virus: “Debemos tomar decisiones urgentes para disminuir la circulación del virus y darle ayuda económica a cada argentina y argentino que sea perjudicado por estas disposiciones extraordinarias”.

Ahora bien, no fueron sólo los jefes comunales del Frente de Todos los que se mostraron alarmados por el aumento exponencial en los contagios. El intendente de Juntos por el Cambio de Lanús, Néstor Grindetti,  reconoció que la situación epidemiológica "está complicada”.

“Veníamos de un fin de año con 70,80 contagios por día, hoy estamos en casi 300, el crecimiento es preocupante, tenemos a todo el equipo trabajando, los hospitales provinciales están trabajando, hay situaciones realmente preocupantes”, señaló y subrayó que el momento más álgido de la pandemia, durante el año pasado, habían alcanzado el pico de 280 contagios por día. Hoy lo superaron.

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