Gustavo Menéndez se hizo conocido en 2015, cuando asumió la intendencia de Merlo tras destronar a Raúl Othacehé, el "barón de conurbano" que gobernó ese distrito por 25 años sin interrupciones. Casi un año después, asumió como Presidente del Partido Justicialista bonaerense, en reemplao de Fernando Espinoza.

En los últimos años, la postura de este dirigente mantenía una equidistancia entre el kirchnerismo y el resto del peronismo, aunque nunca terminó de romper lazos. Hoy permanece en el grupo Fénix, que apoya a Cristina Fernández de Kirchner, aunque pide una renovación que supere el liderazgo de la expresidenta, que hoy "no alcanza" para ganar elecciones. Siempre se mostró muy cercano a las ideas del Papa Francisco. 

Menéndez nació el 2 de febrero de 1967 en Parque San Martín en un hogar de clase media baja, hijo de madre soltera, jefa de hogar, operaria textil, gremialista y militante peronista. La señora Menéndez y sus dos hijos (Gustavo y Karina), se mudan a la vecina localidad de Padua cuando sus hijos eran niños.

En 2007, el ahora intendente era Director Provincial de Casinos en la administración de Felipe Solá y se le inicia una causa judicial por defraudación por la desaparición de 600.000 pesos del Tesoro del Casino Central de Mar del Plata. La causa fue elevada a juicio oral en 2015.

En 2011, el secretario de Legal y Técnica Carlos Zannini le impidió a Menéndez competir en la interna con Othacehé. Vetado por, quinta vez, Menéndez deja el FPV y busca apoyo en Eduardo Duhalde y el Frente Popular para participar de las elecciones a intendente en 2011.

A poco tiempo de haber asumido como jefe comunal, el peronista celebró su cumpleaños de 50 años con un particular festejo en el que se hizo un "book" de fotos posando como modelo, lo que generó revuelo en las redes sociales.

Menéndez gobierna uno de los municipios más pobres del conurbano bonaerense. Según las propias cifras que el intendente informó meses antes de asumir, en Merlo, el 65% de la gente no tiene cloacas, el 54% no tiene gas natural y el 52% no tiene agua. De 14.700 cuadras, 9 mil son de tierra.

El titular del PJ bonaerense es uno de los pilares que salieron a dar declaraciones junto a José Luis Gioja ante la intervención de Luis Barronuevo por disposición de la jueza María Romilda Servini. Consideró que el fallo judicial es “a medida del gobierno”. “Nos quieren amordazar, nos quieren dejar sin herramientas, pero el peronismo siempre saldrá fortalecido”, lanzó.

En ese sentido, Menéndez evaluó que “en el peor momento del Presidente (Mauricio Macri), donde su gestión hace agua, donde su imagen ha caído, la respuesta es intentar con el aborto dividir al pueblo y ahora no se les ocurrió mejor idea de meterse con el partido. Aquí nadie baja los brazos, aquí nadie se entrega”.

“Esta decisión de la Justicia que nos parece de otro tiempo, que pensamos que habíamos dejado atrás. Este fallo, en 24 horas, sin ningún tipo de medida preventiva, sin ningún tipo de intimación, nos parece un tiro en el corazón del sistema democrático que el peronismo está dispuesto a defender”, sostuvo. Y remató: “El peronismo no es un edificio, el peronismo vive en el corazón de cada uno”.

Menéndez aclaró que “vamos a acatar siempre como lo ha hecho el peronismo con cada fallo de la Justicia”, y agregó: “Estamos seguros de que tanto la justicia, en la que seguimos confiando, nos dará la razón. Si no, la razón nos la dará el pueblo argentino, que está cansado que le metan la mano en el bolsillo”.