Días atrás, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó a Laboratorio Domínguez a comercializar misoprostol para uso ginecológico y obstétrico en farmacias. 

 

La presentación del medicamento -que comenzará a venderse antes de fin de año bajo el nombre Misop- es en 12 comprimidos vaginales y apunta a ofrecer la dosis exacta necesaria para interrumpir un embarazo. Hasta ese entonces, su uso estaba restringido a instituciones hospitalarias. 

Vale recordar que antes de la autorización de venta de esta nueva versión, el misoprostol sólo podía conseguirse con la marca Oxaprost en un compuesto que también incluye diclofenac y se utiliza para tratar úlceras gástricas. 

"La nueva presentación del misoprostol implica el uso de menos pastillas y no tiene otros contenidos, por lo cual es mas saludable", le señala a BigBang Victoria Tesoriero, miembro de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. "Además, la medida facilita el acceso y el medicamento será más económico".

Vale remarcar que una caja de Oxaprost actualmente cuesta unos 4.500 pesos y ha llegado hasta a triplicar su valor en los ámbitos de venta clandestina. 

¿Cómo podrá comprarse?

Tal como explica Tesoriero, el el Misop podrá ser recetado por cualquier ginecólogo o ginecóloga para pacientes que quieran abortar bajo alguno de los tres causales en los cuales es legal: si representa un peligro para la vida de la mujer o para su salud, o si es producto de una violación. El medicamento se expedirá bajo receta archivada al igual que los sedantes, antidepresivos e hipnóticos.

El Misop se venderá sólo bajo receta archivada.

"No recetar expone a quienes quieran abortar a un mercado clandestino de la venta de pastillas, a pagar más caro el misoprostol, a conseguir menos pastillas e incluso, a dilatar el tiempo", subraya por su parte Magalí Fernández Valdez, quien participa de las Consejerías de Aborto de la agrupación Nuevo Encuentro. "Sin dudas hay un vínculo directo entre el acceso a las pastillas y garantizar abortos seguros".

En ese sentido, si bien Tesoriero valora como "un avance" la medida de la ANMAT, advierte que el próximo paso "es que se incorpore a la obras sociales como medicamento esencial, ya que la OMS lo definió como tal, y que se sume al paquete de anticonceptivos del Programa Nacional de Salud Sexual y Reproductiva".