El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, difundió este martes un estudio realizado por su cartera que contabilizó para diciembre de 2016 12,1 millones de empleos en blanco, el número más alto de los últimos cuatro años.

Según este documento, el volumen de importaciones y el actual mercado laboral no están relacionados, conforme a un detallado análisis de las cifras de comercio exterior y ocupación por sectores del último lustro.

Hoy en la Argentina hay 12.100.000 trabajadores registrados entre sector público, privado y monotributistas sociales. pic.twitter.com/jtFfCzKiL2

— Marcos Peña (@marquitospena) 7 de marzo de 2017

Por ende, el informe concluyó que "no hay apertura indiscriminada" de las compras externas y que "no hay un problema generalizado de empleo" y Marcos Peña lo celebró en twitter.  

El reporte explicó que las importaciones cayeron 7% en 2016 y que el 80% de estas compras al exterior fue de bienes de capital, intermedios e insumos y no de bienes finales, como vienen denunciando industriales, principalmente de los rubros calzado y textiles.

Además, el informe - que comenzó exponiendo la insuficiencia de los 80.000 puestos de trabajo en blanco del año pasado fue insuficiente-, aunque destaca que esta cantidad supera la generación de 2015señaló que la ocupación en blanco comenzó a crecer en julio y alcanzó en 2016 es el mayor de los últimos cuatro años. Y vaticinó que la recuperación del mercado brasileño y de la obra pública impulsarán en 2017 el movimiento del empleo industrial. De esta forma, el informe interno del Ministerio, al que Télam accedió, desestima denuncias y reclamos de varios sectores empresariales y gremiales, en particular de los industriales, sobre la incidencia de las importaciones en la pérdida de puestos laborales. De todos modos, el reporte reconoció que en el primer semestre de 2016 se destruyeron 53.000 empleos privados, lo que igual resulta en un saldo negativo si se contabilizan los 14.000 puestos que se sumaron en el segundo semestre. Al respecto, apuntaron que se trata de un problema de larga data al señalar que desde 2012 los asalariados en este ámbito oscilan entre 6 y 6,3 millones. En cambio, releva la expansión de otras modalidades de trabajo registrado durante 2016, como los monotributistas, empleados de casas particulares y autónomos (68.000); monotributistas sociales (27.600) y empleados públicos (43.000). El informe de la cartera de Triaca resaltó la prioridad del Gobierno para adoptar medidas que fomenten el empleo privado y responsabilizó a factores exógenos por los más de 60.000 puestos de trabajo perdidos el año pasado: se trata de "una correlación directa con dos factores: la caída de Brasil en el sector manufacturero (-48.000 puestos en el año) y la revisión de la corrupción en la obra pública sobre el sector construcción (-15.000)", se lee en el documento.

De hecho, en 2016 las importaciones fueron 7% menores que en 2015 y 25% más bajas que en el pico de mayor importación que fue el año 2011. pic.twitter.com/E0v0ABbwPK

— Marcos Peña (@marquitospena) 7 de marzo de 2017

Sobre este último punto, el reporte celebró el ahorro de "más de 32.000 millones de pesos" gracias a las licitaciones "más transparentes" del Ministerio de Transporte y "una mejor contratación de proveedores". Con ese dinero, consideraron sus autores, se podrá invertir mejor "en más obras y que generan más empleo y ayudan a bajar los costos de toda la economía".

La evolución de las importaciones

 

Respecto de los reclamos sobre el efecto de las importaciones en el mercado laboral industrial, el informe aseguró que "si el gobierno nacional hubiese repetido la estrategia de apertura comercial de los años ´90 se habrían perdido medio millón de empleos". 

"No hay una apertura indiscriminada de las importaciones", resaltó el reporte que detalló que solo el 20% de las compras externas obedecen a bienes de consumo. Sobre ellos, detalló que "para algunos sectores el porcentaje de Licencias No Automáticas sobre el total de posiciones arancelarias es significativamente alto" y enumeró: prendas de vestir (96%); calzado (94%); muebles (96%); juguetes (81%); maquinaria agrícola (62%); línea blanca (57%). "Tampoco se ha permitido un ingreso irrestricto de bienes de consumo de países de bajos salarios que podrían competir de manera desleal con los productos nacionales. Aún más, el gobierno ha logrado frenar activamente el contrabando de productos", agregó el documento del Ministerio de Trabajo.