El gobernador convocó a la Corte Suprema para tratar la crisis judicial

El gobernador convocó a la Corte Suprema para tratar la crisis judicial

La política debe implicarse en los problemas que aquejan a los Tribunales y que preocupan a la Casa Rosada. Esta opinión de Germán Garavano, ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, surtió efectos en el Gobierno de Juan Manzur. Un día después de la publicación del comentario, el titular del Poder Ejecutivo convocó a la Corte Suprema de Justicia de Tucumán a una reunión que tendrá lugar este martes a partir de las 10. 

Se trata del primer encuentro entre las autoridades de los dos poderes desde que comenzaron la ola de denuncias contra integrantes del Ministerio Público apuntalada por el Colegio de Abogados de la Capital, y las tensiones entre el jefe de los fiscales y defensores oficiales, Edmundo Jiménez, y la Corte. El conflicto está cumpliendo un año si se toma como punto de partida el cuestionamiento de la conducta de Alejandro Noguera, fiscal ante la Cámara de Apelaciones, en “Jorrat”, causa que involucra, entre otros, a Rubén “La Chancha” Ale. En los últimos dos meses, tanto Francisco García Posse, titular del Colegio, como el ministro público Jiménez viajaron a la Ciudad de Buenos Aires para exponer sus versiones ante Garavano.

“Estamos muy preocupados por la situación de la Justicia de Tucumán. Nosotros hemos sugerido a quienes vinieron hasta aquí la conveniencia de que la Provincia haga un esfuerzo por zanjar todos los asuntos que están afectando de algún modo al Poder Judicial”, dijo Garavano en una entrevista reciente. El ministro afirmó que el asunto debía ser una de las tareas principales de Manzur y de la Legislatura, y añadió que, recién cuando fracasasen las gestiones en la provincia, el Gobierno de Mauricio Macri podría considerar una intervención federal.

“Nosotros creemos que hay que dar tiempo y espacio, y que la Justicia de Tucumán debe encargarse de esclarecer casos que generan conmoción social, además de las cuestiones internas que se vislumbran. De hecho, los conflictos judiciales de Tucumán han sido los que más recurrentemente han llegado hasta aquí desde que asumimos”, manifestó el ministro.

Vínculo agrietado

Las palabras del funcionario nacional tuvieron repercusión inmediata. El lunes por la mañana, la Corte celebró una reunión interna para tratar el asunto. Fuentes de ese cuerpo informaron que los vocales decidieron solicitar su entrevista con Garavano. En paralelo, Manzur fijó la cita de este martes. En los Tribunales comunicaron que cuatro de los cinco miembros del alto tribunal confirmaron la asistencia: Antonio Gandur (presidente), Claudia Sbdar, Antonio Estofán y Daniel Posse. En duda está el vocal René Goane, que no suele participar de este tipo de actividades y que, de hecho, faltó a la reunión que este mes celebraron sus pares con el vicegobernador Osvaldo Jaldo en la Legislatura. En esa oportunidad, la Corte pidió la reforma parcial del Código Procesal Penal que el Poder Legislativo sancionó durante la semana pasada.

Los jueces supremos expondrán su punto de vista sobre la situación de la Justicia y la relación conflictiva con Jiménez, que luego de visitar a Garavano denunció la existencia de una crisis estructural en los Tribunales, y pidió la autarquía al Poder Ejecutivo (esto le permitiría librarse de los controles presupuestarios y de personal que ejerce el alto tribunal). “Jiménez está enloquecido y medio zafadito”, había dicho Goane al respecto.

Un informe estadístico reciente muestra, según la Corte, una mejora en el rendimiento de los fueros civiles. El fuero penal, por el contrario, lleva años colapsado. De todos modos, los vocales discrepan con Jiménez en cuanto a que el servicio esté comprometido en términos generales. Las diferencias entre las autoridades se remontan a la auditoría ordenada sobre causas objetadas del ex fiscal Guillermo Herrera, que terminó jubilándose en 2015. Pero la grieta se profundizó en diciembre, cuando la Corte intervino en un caso de Herrera a instancias del camarista Enrique Pedicone, quien había dicho que Jiménez y un grupo de magistrados había operado para impedir la revisión de una resolución que beneficiaba al ex fiscal.

“La crisis es alarmante”, insistió Jiménez

El ministro público Edmundo Jiménez dijo el lunes a la prensa que la situación de los Tribunales impedía exigir un trabajo de calidad a los jueces. “La crisis es alarmante”, manifestó.

Además, el ex ministro de Gobierno y Justicia histórico del alperovichismo anunció que el ministro nacional Germán Garavano se había comprometido a distribuir un fondo de $ 50 millones entre los ministerios públicos del país. - 

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