Ayer surtidores.com.ar dio cuenta que – por una disposición judicial – el partido de Tres de Febrero en la provincia de Buenos Aires, debió dar marcha atrás con el cobro de la Tasa Vial a los combustibles. No obstante, la Municipalidad de Comodoro Rivadavia en Chubut, avanza con la implementación del polémico gravamen para recuperar fondos locales y afrontar gastos cotidianos en momentos de baja en la recaudación.

Rápidamente, desde el sector de los dueños de expendedoras de combustibles, salieron al cruce contra una carga que fue declarada “inconstitucional” por diferentes instancias.

Osvaldo Lewis, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio de Chubut, alertó al respecto que “esta tasa ha sido aplicada en otras provincias y a raíz de los trastornos, inequidades y perjuicios que trajo, en definitiva, fracasó y tuvieron que anularla, especialmente en las provincias de Buenos Aires y Córdoba”.

El proyecto de ordenanza que comenzó a debatir el concejo deliberante de Comodoro a pedido del Intendente Carlos Linares, de origen justicialista, tiene bases similares a las iniciativas de Lomas de Zamora, Pergamino, Campana, Tres de Febrero y otras localidades como en Tigre y Vicente López, donde se viene aplicando desde hace varios años a pesar de la oposición estacionera.

“El artículo 2 del texto original, define como consumidor al contribuyente que adquiere su producto en la estación de servicio y es aquí donde surge el primer problema”, explicó Lewis y agregó que “el 45 por ciento del combustible que se comercializa en la ciudad, no pasa por nuestros establecimientos, sino que se vende en los canales directos, mayoristas o de venta en ruta”, recalcó el titular de la entidad de empresarios pymes de combustibles.

Por ello, aludió que de esta forma, la injusticia hacia el expendedor es muy notoria desde el punto de vista tributario, a la vez que expresó que “numerosos consumidores adquieren el producto directamente con la petrolera, especialmente con YPF, canales exentos del pago de este tributo”, dijo.

Aclaró que tal cual se quiere imponer esta norma, los únicos perjudicados son los automovilistas y los empresarios de Estaciones de Servicio, ya que “el mismo municipio que quiere llevar adelante la tasa no la abona por comprar directo a la petrolera y tampoco lo hacen las industrias ni las grandes flotas de camiones”.

Finalmente advirtió Lewis que “queremos una reunión con las autoridades del Concejo Deliberante para explicarles a los ediles las problemáticas que se generarán, como por ejemplo, las estaciones que vendemos por sistema consignado, en el cual facturamos por cuenta y orden de YPF con el precio impuesto desde la central de la compañía de manera automática y en el caso de aplicarse la tasa deberíamos aplicar un sistema paralelo para contabilizar el 2 por ciento de la tasa, buscan implementa el polémico gravamen para recuperar fondos locales y afrontar gastos cotidianos en momentos de baja en la recaudación”.