La Cámara de Diputados abrirá el jueves por primera vez en 2021 para sancionar una ley que prohíbe a Martín Guzmán tomar deuda con bonistas o el FMI sin pasar por el Congreso y financiarse con dólares para gastos corrientes, en la primera sesión del año debido a que Cambiemos se negó a debatir en forma remota proyectos que no sean aprobados por unanimidad. 

El temario del jueves no tendrá temas discordantes y los jefes del principal interbloque opositor avalarán el protocolo de sesiones remotas firmado por el resto de las bancadas del 28 de diciembre porque vence el viernes y de ese modo durará sólo ese día.

"No vamos a prorrogar nada y continuamos con la decisión de avalar sesiones remotas sólo con temarios de consenso", sostuvo ante LPO una autoridad de Cambiemos, donde sostienen que los protocolos necesitan consenso unánime y no de la mitad más uno de los presentes. En el oficialismo no opinan lo mismo pero por ahora prefieren no tensar la cuerda.Con respaldo de Cambiemos, el Senado aprobó la ley que prohíbe la deuda externa para gastos corrientes

Los otros proyectos que se tratarán el jueves también tendrán respaldo unánime: una indemnización a los familiares de los fallecidos en el submarino Ara San Juan, la promoción de inversiones en construcción y el financiamiento al sistema de ciencia, tecnología e innovación. 

Martín Guzmán. 

Una nueva ley para restringir la deuda fue un reclamo de los diferentes sectores del peronismo durante el gobierno de Mauricio Macri, que logró frenarlo pese a no tener mayoría en ninguna de las Cámaras del Congreso.

El Senado aprobó un proyecto con ese fin en 2016, después de la sanción del acuerdo con los holdouts, pero quedó cajoneado en la Comisión de Presupuesto de Diputados, controlada por Luciano Laspina, del PRO, quien volverá a batirse con el oficialismo sobre el daño real de la deuda heredada por Alberto Fernández. 

Guzmán hizo propia la letra de aquel texto escondido en la Cámara baja, que se reducía a exigir una ley específica para cada vez que un Gobierno dedica a salir a los mercados de crédito por encima de los límites establecidos en el presupuesto nacional. 

Pero los senadores del Frente de Todos le agregaron un artículo que, además, prohíbe la toma de deuda en dólares para gastos corrientes, motivo de la crisis financiera del gobierno de Macri. El ministro de Hacienda no parecía estar al tanto pero tuvo que aceptarlo. 

La ley, además obliga a tener una aval del Congreso para cualquier acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional como que el que negocia Guzmán por la devolución del préstamo de 44 mil millones de dólares que tomó Macri. 

El ex jefe de Estado nunca lo envió a los recintos porque se escudó en la ley de administración financiera, que permite acuerdos con organismos internacionales a sola firma del Poder Ejecutivo. Con las modificaciones de los senadores, Guzmán no tendrá esa posibilidad y tampoco podrá usar los excedentes de una renegociación con el FMI para paliar el déficit fiscal y engrosar las arcas del Banco Central. Son los límites que puso el Senado.