Comenzarán a hacer las trincheras para el basural de Siancas

Comenzarán a hacer las trincheras para el basural de Siancas

La Municipalidad de Güemes recibió maquinaria pesada para trabajar en el relleno sanitario departamental.

El intendente de General Güemes, Sergio Salvatierra, recibió un envío de maquinarias pesadas para ser utilizadas en el relleno sanitario departamental. Con esta entrega, el Consorcio Valle de Siancas, a cargo del relleno sanitario, podrá trabajar en la eliminación del basural a cielo abierto existente para reemplazarlo por el nuevo sistema de trincheras, con todas las ventajas para el medio ambiente que ello significa. Las máquinas recibidas fueron una pala frontal, un punto verde móvil, una chipeadora de ramas, una balanza y una enfardadora, quedando pendiente el envío de una moledora de vidrio. Estas máquinas son el resultado de un proyecto elaborado desde la Municipalidad y elevado al Ministerio de Medio Ambiente de la Nación, quienes a su vez buscaron el financiamiento por parte del BID.

El Consorcio Valle de Siancas fue creado a fines del 2011 por medio de un decreto promovido desde la Provincia, donde se buscaba erradicar los basureros a cielo abierto, reemplazándolos por rellenos sanitarios, cuya principal característica es la de mantener la basura enterrada en grandes trincheras o zanjones.

En ese momento los intendentes que firmaron el convenio fueron Daniel Segura por General Güemes, Mario Cuenca por Campo Santo y Fausto Valdiviezo por El Bordo.

Estudios medioambientales indicaron que el predio conocido como del exaeroclub perteneciente al municipio de Güemes, era el más adecuado para instalar el relleno sanitario, es decir que toda la basura departamental debía ser enviada a ese municipio.

“Tenemos mucho por hacer, queremos cambiar lo antes posible la forma en que tratamos nuestra basura, lo que desechamos a diario, que es mucho. En ese sentido ya nos pusimos en marcha con mucha seriedad y con enorme respeto por el ambiente de cara al futuro”, expresó González, directora de Medio  Ambiente.

En un principio, sería la Provincia quien enviaría los fondos para el inicio de las primeras obras necesarias para comenzar con el nuevo sistema. Pero por muchos desacuerdos posteriores entre los integrantes del Consorcio, el envío de los recursos se demoró, hubo solo una primera partida insuficiente para poder poner en marcha el proyecto.

Las obras no avanzaron más allá de un cercado perimetral, pero en base al acuerdo firmado, la basura de todo el departamento comenzó a ser depositada en el antiguo basurero a cielo abierto güemense, poniendo en riesgo la salud de la comunidad local por el enorme volumen de basura que se recibe en forma diaria.

Años de atraso

Poco se pudo hacer en los años subsiguientes, solo se avanzó en la consolidación de los terrenos para el relleno sanitario, los cuales estaban ocupados por familias que los utilizaban para la cría de animales. "El año pasado nos propusimos trabajar fuertemente con la basura, comenzamos por poner en funcionamiento nuevamente el Consorcio Valle de Sianca que ya estaba creado, desde mi área (Dirección de Medio Ambiente) elaboramos un proyecto relacionado con el relleno sanitario, el proyecto fue aprobado y recibimos las máquinas que nos permitirán trabajar en ese proyecto", explicó la directora de Medio Ambiente, Mirta González.

Ordenar el descontrol

La primera tarea que llevaron a cabo fue reorganizar el basural departamental existente, debido a que se había transformado en una preocupación por su descontrolado crecimiento. "Pudimos mover la basura para recuperar espacios, planificamos la instalación de puntos verdes para la acumulación de basura reciclable. También vamos a trabajar en recuperar la trinchera que ya fue excavada pero que se encuentra llena de yuyos y escombros", explicó González.

El proyecto, además de trabajar con el sistema de trincheras, prevé la capacitación de la comunidad para que realice la separación de la basura domiciliaria en el lugar de origen, de esa manera solo llegará al relleno sanitario todo aquello que no se pueda reciclar y su volumen será mucho menor, lo que le dará una vida útil más prolongada a cada una de las trincheras.

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