Desde temprano, sectores del oficialismo se movilizaron al Concejo, con la presencia de la militancia, con jóvenes de Franja Morada; y grupos de choque, de la hinchada de Estudiantes, creando un clima tenso entre el sector opositor que como todos los años se acerca y aplaude a los ediles que lo representan.

Es así que antes de comenzar ya se rebolearon piñas, empujones y otras yerbas, haciendo peligrar el comienzo de sesión, donde el intendente realiza el discurso de lo que hizo y de lo que va hacer durante el 2017.

Berisso ha pasado a ser un distrito testigo en cuanto a conflictividad, dado que hay un conflicto con los empleados municipales, quienes no se  han puesto de acuerdo con el intendente en la cifra del aumento.

Mientras, el jefe comunal no encuentra el rumbo en este tema paritario y genera tensión con los empleados municipales, y para completarla, el propio oficialismo contrata barrabravas y moviliza desde La Plata.

Un final abierto en la tarde de este viernes, con el tardío comienzo de sesión, enmarcado en un clima enrarecido, donde ya sectores de la oposición no querían sentarse si no se garantizaba la seguridad.

Resta mencionar que en el lugar se encuentra presente Gendarmería, pero la que se abrió este viernes parece ser una grieta de difícil cicatrización.