Picante, el vicegobernador Osvaldo Jaldo acompañó a Juan Manzur en la entrevista con este diario, al cumplir un año desde su llegada al poder. El presidente de la Legislatura insistió en la importancia del trabajo en común con el sector privado, se refirió a la relación de fuerzas en la Cámara y a la controversial partida “ayudas sociales a personas”, conocida como gastos sociales. “Para poder apoyar al sector privado tenemos que tener la casa en orden. Cumplir con los compromisos y ayudar a los municipios con dificultades financieras. Llegamos para gobernar para todos”, sintetizó.

- ¿Cuál es su balance como titular de la Legislatura?

- El Frente para la Victoria (FpV) sacó 33 legisladores, la oposición 16. Uno no asumió (en referencia a Sergio Mansilla, que aguarda que la Justicia defina si puede o no asumir). Después de un año, tenemos un bloque de 32 legisladores. Y cuando asuma el 33, seremos 33 del FpV. Echenlé una miradita a la oposición: llegaron 16 pero ¿cuántos bloques son? Somos un espacio, y un bloque. El otro espacio tiene nueve o 10. Pero no atropellamos, buscamos el diálogo permanente. Es una Cámara plural. Muchas leyes salieron por mayoría calificada (dos tercios de los votos).

- ¿Cómo quedó la imagen de la Legislatura por el conflicto de los gastos sociales?

-El tiempo lo dirá. Vamos tomando decisiones. El presidente conduce pero todos los bloques opinan. Bancarizamos los movimientos y la cuestión parlamentaria esta en la web. La idea es avanzar en la parte administrativa. Asumimos el compromiso de avanzar con la ley de Información Pública.

-Si el Tribunal de Cuentas aprobó las rendiciones, ¿por qué no se da a conocer el destino del dinero de los gastos sociales?

-Porque se judicializó. Hay un proceso que hay que respetar (N de la R: legisladores, dirigentes y ciudadanos iniciaron demandas en el fuero penal -provincial y federal- y en el contencioso por el presunto uso irregular de esos supuestos subsidios ejecutados en 2015). Haremos lo que decida la Justicia. No podemos tomar decisiones unilaterales porque podemos obstaculizar.