Bahía, con el mayor nivel de indigencia en el país

El Indec reportó una baja general de la pobreza a nivel nacional, aunque nuestra ciudad quedó claramente entre los peores registros.
El mayor nivel de indigencia en el país durante el primer semestre de este año se registró en Bahía Blanca, según datos comparados con el mismo período de 2012 del Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec).

Nuestra ciudad alcanzó un índice del 3,2%, seguida con el 2,5% por Neuquén y Mar del Plata; y el 2,4% en Posadas.

A su vez, el índice de pobreza local, siempre de acuerdo con el Indec, trepó al 8,8%. Es decir, cerca de los niveles de algunos de los distritos más desfavorecidos del noreste, como Corrientes (9,8%), Posadas (9,7%), Resistencia (8,4%) y Formosa (7,1%).

En la provincia de Buenos Aires, los partidos del Conurbano tuvieron un promedio del 5,7%, mientras que en La Plata la cifra es del 1,0% y en Mar del Plata, del 6,4%.

Para no ser considerada pobre, una persona adulta requirió en junio de este año de un ingreso de 543,48 pesos al mes para adquirir alimentos, indumentaria y costearse traslados.

En tanto, para no ser considerada indigente, lo que implica poder adquirir la cantidad mínima de alimentos para subsistir, necesitó de 236,58 pesos, según los datos del organismo nacional.

En términos generales, el Indec aseguró que el Indice de Pobreza en todo el país registró un retroceso cercano a 2 puntos porcentuales al término del primer semestre del corriente año respecto de igual período de 2012, al ubicarse en el 4,7% contra el 6,5%.

Además, el Indice de Indigencia bajó al 1,4% entre enero y junio de 2013, contra el 1,7% de igual período de 2012.

Junto a La Plata, los menores niveles de pobreza se registraron en Santa Rosa, con el 1,1%; San Luis, 1,4%; Comodoro Rivadavia y Río Gallegos, ambas ciudades con el 1,6%; y Mendoza con el 1,7%, entre otros grandes centros urbanos.

Al término del primer semestre, la pobreza afectaba al 2,2% de los riojanos y 2,7% de los salteños, al 4,6% de los tucumanos, al 5,2% de los jujeños y al 6,6% de los catamarqueños.

La Encuesta Permanente de Hogares es un programa nacional que lleva adelante el Indec y que tiene por objeto relevar características sociodemográficas y socioeconómicas de la población.

La estimación de la incidencia de Pobreza e Indigencia se realiza a partir de la información obtenida por la mencionada encuesta.

Para el organismo estadístico, el Indice de Pobreza se ubicó en su nivel más bajo desde 2003, cuando comprendió al 54% de la población argentina, tras la crisis desatada con el fin de la política de convertibilidad.

Esta merma en el nivel de pobreza y de indigencia, se agregó oficialmente, se dio en el marco de un crecimiento de la economía del 5,8% en promedio en los últimos diez años, mientras que la tasa de desocupación se mantuvo en el 7,2%, comparada con el último registro.

Más allá de estos datos puntuales, el Indec se encuentra muy cuestionado desde hace años, debido al control discrecional que tiene del mismo el gobierno nacional a través de la figura del secretario de Comercio, Guillermo Moreno.

Pocas variantes. Desde Cáritas seccional Bahía Blanca, el vicepresidente Pablo García, actualmente en uso de licencia, se refirió al tema tras la consulta realizada por este diario.

"No trabajamos con datos ni estadísticas porque un punto porcentual más, o también uno menos, no modifica nuestro accionar. Desde Cáritas no hemos notado variantes fuertes en la demanda de un año para el otro", expresó García inicialmente.

"Tenemos gente con necesidades en distintos puntos de la ciudad y atendemos poblaciones diversas. Desde los núcleos más duros de pobreza hasta otras situaciones que van más allá y se relacionan con el aspecto cultural y educativo", añadió.

"Las demandas por indigencia son históricas, pero insisto que no podemos corroborar que haya un cambio que sea correlativo con el informe que plantea el Indec", concluyó el directivo.

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