La sentencia que pronunció la Cuarta Cámara del Crimen por el crimen de Johana Gordillo (23), ocurrido tras una discusión de tránsito en octubre de 2013 en Guaymallén, traerá un gran debate judicial detrás. Los jueces condenaron a 10 años de prisión a Daniel Méndez (39) entendiendo que no tuvo intención de asesinar, pese a que utilizó un arma de fuego.

En la mañana de este miércoles, tanto la parte defensora como la acusatoria se mostraron sorprendidos por la decisión del tribunal presidido por Horacio Báez. La condena terminó siendo por homicidio culposo en concurso real con tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego.

En el debate se analizaron dos consecuencias de un mismo hecho: la muerte de Johanna Gordillo y las heridas que recibió su pareja, Eduardo Besares (39). Con la calificación que impusieron los magistrados se interpreta que Méndez asesinó sin intención a la joven, aunque sí tuvo voluntad para intentar ultimar a su pareja.

Los fundamentos del veredicto se conocerán a mitad de la semana que viene y las partes analizarán si lo apelarán y dejarán que decida un tribunal de alzada, situación que es muy probable según anticiparon los abogados defensores.

Mezcla de solicitudes

“Los jueces mezclaron los alegatos de la parte acusatoria y de la defensa”, aseveró una fuente ligada al expediente. Las argumentaciones de las partes se realizaron el miércoles pasado en la Cuarta Cámara del Crimen.

El primer turno fue del fiscal de cámara Gonzalo Nazar quien solicitó 14 años de prisión para el acusado. El representante del Ministerio Público entendió que Méndez tuvo la intención tanto de asesinar a Gordillo como de intentar ocasionar la muerte de Besares, es decir, dos homicidios agravados por el uso de arma de fuego aunque uno de ellos en grado de tentativa.

En la misma sintonía trascurrió el alegato del abogado querellante, Guillermo Nievas, quien hizo hincapié en el carácter doloso de los crímenes y pidió la misma condena que el fiscal Nazar. “Entiendo que el dolo existe porque el autor gritó 'te voy a matar a vos y a toda tu familia'. También efecutó diez disparos. Con este fallo creo que los jueces consideraron que Méndez sólo quiso matar a Besares", aseveró el letrado.

Diferente fue el pensamiento de los abogados defensores Pablo Cazabán y Guillermo Gorelik al momento de sugerir a los jueces. Los letrados entendieron que el hombre disparó en primera instancia contra la camioneta donde circulaban las víctimas. “Las balas atravesaron la puerta e hirieron a la chica. Pero si en verdad hubiera tenido la intención de matarla habría disparado directamente hacia el interior del vehículo”, explicó Cazabán.

Con respecto a las lesiones que sufrió el otro joven en su mano y en su pierna, el abogado aseguró que “ocurrieron durante un forcejeo donde el disparó salió accidentalmente”.

En los alegatos, los defensores de Méndez pidieron la absolución por el beneficio de la duda o, en caso de ser encontrado culpable, que los delitos se consideren como culposos.

El caso

El 5 de octubre de 2013, Gordillo y Besares circulaban en una camioneta Ford por calle Sarmiento de Guaymallén cuando al llegar a la intersección con Gomensoro protagonizaron una discusión vial. Cerca de las 21, la pareja se peleó con el conductor de una Ford F-100 que casi los colisiona en la esquina regulada por un semáforo.

La pareja llegó hasta la casa de la madre de la joven en el barrio San Cayetano cuando volvieron a ser interceptados por el individuo que comenzó a efectuar disparos.

Uno de los proyectiles impactó en el espalda de la joven que terminó muriendo una semana después en el Hospital Central. En tanto que Besares sufrió heridas de arma de fuego en la mano izquierda y en la pierna derecha.