Alberto Fernández habló con la directora del FMI e inició la negociación de un nuevo programa

Alberto Fernández habló con la directora del FMI e inició la negociación de un nuevo programa

El Presidente, junto a Guzmán y Chodos, dialogaron con Kristalina Georgieva. Luego, el ministro y Pesce, le enviaron una carta al organismo en la formalizan el pedido de renegoaciación. El Gobierno busca reestructurar la deuda de USD45.000 millones

 

 

El presidente Alberto Fernández dialogó esta mañana con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional ( FMI), Kristalina Georgieva, y dio inicio formal a la negociación de un nuevo programa con el organismo que reemplace el stand by firmado por Mauricio Macri. Además,  el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, le enviaron una carta al FMI para invitar a su staff a una misión para comenzar las conversaciones.

El diálogo fue dado a conocer por el propio mandatario durante el acto de inauguración de una fábrica de lavarropas por videoconferencia. "Pudimos intercambiar ideas sobre lo que pasa, y saber que, sin prisa pero sin pausa, nos podremos poner a trabajar para ordenar el desorden que heredamos", contó. De la charla participaron también Guzmán y el representante argentino en el directorio del organismo, Sergio Chodos.

“Mi conversación con Kristalina me alienta a pensar que vamos a poder hacerlo con una lógica común, que es la lógica de no postergar a la Argentina y de no hacer sufrir a los que ya mucho han sufrido”, planteó Fernández.

La pulseada con el FMI será el capítulo más duro de la renegociación de la deuda. Hasta aquí el organismo con sede en Washington fue un aliado del Gobierno en la negociación con los acreedores privados liderados por el fondo BlackRock y trabajó para que los bonistas aceptaran una fuerte quita de intereses. Pero una vez garantizado un margen de cobrabilidad para su propio crédito se sentará del otro lado del mostrador. La expectativa oficial es que el acuerdo con el Fondo se alcance en el primer trimestre de 2021.

Guzmán, Pesce y Chodos en la firma de la carta a Georgieva

Guzmán señaló que buscará refinanciar el préstamo y extender el plazo de repago de los USD45.000 millones más intereses del multimillonario acuerdo Stand By que firmó Mauricio Macri con la antecesora de Georgieva, la francesa Christine Lagarde. Con un organismo que no acepta quitas, la intención oficial es conseguir un período de gracia de al menos tres años, el mismo que originalmente propuso a los bonistas pero finalmente redujo a uno.

Esta negocación implicará debatir un nuevo programa, cuyo foco estará en las metas fiscales, entre otras condicionalidades que buscará imponer la entidad multilateral.

En ese sentido, luego de la firma de la misiva dirigida a Georgieva, Guzmán señaló que el nuevo programa deberá tener como premisa central que "no es posible la estabilización sin recuperación económica". Por su parte, Pesce sostuvo que “es necesario que el próximo programa tenga presente la estabilidad como el crecimiento de la economía, del crédito y del mercado de capitales local”.

Con todo, el ministro dio señales en el último tiempo de querer evitar una expansión aún mayor del agujero fiscal generado por la pandemia, por ejemplo, al descartar la posibilidad de implementar por el momento una renta básica universal que reemplace al ingreso familiar de emergencia (IFE), como proponían otros funcionarios

La carta y la estrategia de negociación

La carta enviada a Georgieva, que destaca la profundización de la crisis que dejó el plan de ajuste dispuesto en el acuerdo previo, explicita la perspectiva con la que negociará el Gobierno. Tras señalar que las políticas paliativas de la coronacrisis dispararon el rojo primario a 3,3% del PBI en el primer semestre, afirma: "Estamos determinados a recomenzar el proceso de implementación de un sendero fiscal consistente una vez que los efectos de la pandemia desaparezcan, reduciendo el déficit fiscal primario de un modo que sea compatible tanto con la sustentabilidad de la deuda pública, como con la recuperación económica". Es decir, un camino a la estabilización de las cuentas públicas sin un shock de ajuste.

"Planeamos establecer políticas consistentes para lograr los objetivos del programa de estabilidad financiera y macroeconómica, y tomaremos cualquier medida adicional que se requiera a tal fin. Proveeremos al staff del FMI con toda la información que sea necesaria para la implementación del programa", agrega.

En concreto, la misiva repasa los efectos negativos que tuvo el acuerdo firmado por Macri, el impacto de la pandemia y las "importantes necesidades de balanza de pagos" que enfrenta el país para el período 2021-2024, en el que se concentran los vencimientos comprometidos con el organismo. "En este contexto, requerimos formalmente asistencia financiera bajo un Programa con el FMI, e invitamos al staff a una misión para comenzar las conversaciones", solicita.

Según precisaron fuentes oficiales consultadas por este diario, esto no significa un pedido de dólares frescos sino el requerimiento de un nuevo préstamo para refinanciar los USD45.000 millones y patear hacia adelante los plazos de repago.

Para hacerlo, el Gobierno tendrá dos modelos de programas del Fondo para negociar: el stand by, que permite ampliar los plazos de tres a cinco años y se basa fundamentalmente en metas fiscales, y el extended funds facilities (facilidades extendidas), que tiene hasta diez años de plazo pero incluye el compromiso de implementación de reformas estructurales, como la previsional, laboral y tributaria.

Un primer capítulo de este debate se dará en relación al diseño y las metas del Presupuesto 2021, que el Ejecutivo enviará al Congreso a mediados de septiembre e incluirá, según adelantó, una modificación de la estructura impositiva.

"Un nuevo acuerdo que incluya una reprogramación de los vencimientos de deuda con el FMI es un paso necesario para resolver la crisis económica a la que se condujo al país en los últimos años y así poder poner y mantener a la Argentina de pie", remarcó Guzmán desde su cuenta de Twitter.

De cara a la negociación, el ministro resaltó la responsabilidad compartida entre el Gobierno de Cambiemos y el organismo en la situación económica que enfrenta el país: "La crisis que hoy afecta a nuestro país fue profundizada por un acuerdo rápido con el FMI en el año 2018, insostenible, y realizado de espaldas a la sociedad. De un modo distinto, el camino para llegar a un programa que ayude a Argentina lo recorreremos de frente a la sociedad".

Como adelantó BAE Negocios, las negociación comienza en paralelo al cierre de los canjes de los bonos bajo legislación extranjera y local por USD66.238 millones y USD41.715 millones, respectivamente.

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