En nuestra provincia, para el año 2014 se aprobó en la Cámara de Diputados un presupuesto de recursos de casi $20 mil millones, con un superávit muy importante, incluyendo en el mismo importantes sumas de dinero para pagar los compromisos de la deuda pública provincial.

Felizmente y continuando con lo establecido en el año 2010, en el programa de desendeudamiento, el gobierno nacional volvió a refinanciar para el año 2014 las deudas existentes de nuestra provincia con la Nación. De la misma forma que lo hizo en el año 2011, en el 2012 y el año 2013. Dándole al Chaco un ingreso extra de dinero fresco de alrededor de $120.000.000,00 para el 1er trimestre/2014 y así será para los trimestres sucesivos.

Si miramos la recaudación impositiva, podemos decir con satisfacción que para el mes de Enero/2014 el aumento fue del 49,16%, para febrero/2014 el aumento fue del 35,7%, para marzo/2014 el aumento fue del 30,6% y para abril/2014 el aumento fue del 37,1%, comparados estos ingresos a idénticos meses del año 2013. A lo que debemos sumarle las remesas de fondos de programas nacionales, que ingresan a la provincia en cantidad significativa producto de la presencia del jefe de gabinete.

Es decir que los fondos que ingresan a la caja del gobierno provincial, están por encima de lo previsto en el Presupuesto confeccionado y enviado por el Poder Ejecutivo Provincial a la Cámara de Diputados que luego fuera aprobado.

Ante esta situación y al igual que muchos chaqueños, me pregunto: ¿Cuál es el motivo por el cual tenemos una provincia paralizada?, no se atiende el reclamo de los empleados públicos que día tras día ven perder, producto de la inflación, el poder adquisitivo de sus salarios. No se cumplen con los compromisos salariales hechos oportunamente, como los de la Policía. No se provee a los hospitales públicos de los insumos básicos para la prestación del servicio de salud, no se atiende los reclamos de la educación, no se transfieren en tiempo y forma la plata a los consorcios camineros, no se actualizan ni transfieren en tiempo y forma las remesas para comedores escolares, barriales e infantiles; no se atiende tal, lo comprometido, a la industria, al sector forestal, a los productores agropecuarios. No se les reconoce ni paga los compromisos a proveedores y contratistas del Estado, aun sabiendo como muchas de esas deudas tienen el carácter de alimentaria.

Y entonces, ¿dónde está la plata?, ¿qué se hace con esta cantidad de millones que ingresan diariamente a la caja del Gobierno Provincial? ¿qué debiéramos pensar los ciudadanos comunes que vemos anuncios millonarios de recaudación impositiva, por parte de los funcionarios y por otro lado vemos a miles de chaqueños, trabajadores, prestadores, contratistas, emprendedores, de distintos sectores que los obligan a ganar la calle, en contra de su voluntad, para ver si son considerados?

¿No será tiempo, señor Vicegobernador a cargo de la Gobernación, de modificar y mejorar el nivel de gestión, parar el despilfarro, fijar prioridades y de esta forma, hacer que se distribuyan de mejor forma esta enorme masa de dinero con que cuenta el Gobierno Provincial, como nunca en la historia?”.