Las visitas de Cristina y Scioli despejaron dudas sobre el rol de Coqui

Las visitas de Cristina y Scioli despejaron dudas sobre el rol de Coqui

El justicialismo chaqueño recibió en este último tramo de la campaña el impulso de sus máximos referentes nacionales, que se amoldaron a la estrategia de Capitanich; los parelelismos entre el escenario nacional y el local.

El justicialismo chaqueño recibió en el último tramo de la campaña para las PASO del próximo domingo 24, las vitaminas de sus máximos referentes nacionales, que llegaron a la provincia para respaldar la opción encabezada por el candidato a gobernador Domingo Peppo, pero se amoldaron a la singular estrategia del gobernador en ejercicio Jorge Capitanich.

Tanto la presidenta Cristina Fernández de Kirchner como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, siguieron las partituras de un Capitanich que encabeza la campaña sin ser el principal candidato. Las imágenes que quedaron instaladas en la memoria colectiva muestran al primer mandatario codo a codo con la jefa de Estado, en una primera línea que sintetiza la receta proselitista del oficialismo.

El gobernador chaqueño prácticamente monopolizó los ámbitos públicos en la convicción de que su figura será un factor determinante para traccionar votos, una lógica que fue aplicada durante la visita del candidato presidencial con más chances del justicialismo, Daniel Scioli, en un acto de inauguración de la ruta 6 que no dejó espacios para los demás exponentes del PJ local.

Scioli entendió el juego más que nadie. En el orden nacional también aparece como un actor secundario frente a una arrolladora Cristina Fernández de Kirchner, cuyo protagonismo sorprende a propios y extraños dado que le restan poco más de seis meses de mandato, pero se desenvuelve como una gobernante dispuesta a continuar en el centro de la escena incluso después de entregar el mando al futuro presidente.

Quizás sea actitud de CFK y la aceptación por parte de Scioli de tales condiciones el principal mensaje de la visita de ambos, principales figuras de un armado electoral complejo y lleno de intrigas debido a la heterogeneidad de sus componentes, que en otras circunstancias políticas estarían quizás en veredas opuestas.

La realidad chaqueña presenta un paralelismo evidente con el escenario nacional en el que Cristina se ve obligada a aceptar la candidatura de Scioli para pelear una elección muy complicada, en tanto que el gobernador bonaerense entiende que por sí solo no moverá la fibra íntima de los peronistas más fanatizados, permeables a la ampulosidad gestual de una Presidenta que es de todo menos moderada.

Así como CFK y Scioli se necesitan para conformar una oferta electoral que contemple tanto al núcleo duro de votantes K como a los independientes que esperan un cambio de estilo, en el Chaco Capitanich y Peppo entendieron que deberán complementarse si quieren enfrentar con éxito una propuesta versátil y abarcativa como la de Aída Ayala.

Si alguna duda les quedaba a los dirigentes del PJ chaqueño sobre cuál es el rol que le cabe a Coqui en esta cruzada por la continuidad del peronismo, la presencia de Scioli en primer orden y de la Presidenta un día después sirvió para justificar la impronta que le imprime el gobernador a la campaña del Frente Chaco Merece Más.

Como Scioli, Peppo es un buen candidato con un desempeño óptimo en las encuestas, pero su perfil dista mucho de la dinámica que le imprimió Capitanich a la gestión, por lo que el peronismo necesita dar garantías de que su hombre más votado continúa en pleno ejercicio del poder en un esquema de continuidad que transmita confianza al electorado.

Así como la Presidenta se encarga en la órbita nacional de anunciar medidas de largo plazo que serán aplicadas por el gobierno venidero, en la provincia el peronismo necesita garantizar la prosecución de las inversiones, las políticas sociales y la actitud acuerdista que demostró el gobernador actual en ocho años de mandato pese al paréntesis de 16 meses en los que Juan Bacileff Ivanoff, con su interinato al frente del Ejecutivo, mostró la peor cara de la actual administración.

Comentá la nota