La visita de la gobernadora María Eugenia Vidal a nuestra ciudad quedó postergada luego de idas y venidas, confirmaciones y rectificaciones de agenda que repercutieron en los medios locales, que con tantos trascendidos y pocas confirmaciones oficiales quedaron desfazados con lo que finalmente aconteció.

Lo cierto es que la gobernadora decidió cancelar su visita a la ciudad, donde tenía pensado uinaugurar la feria itinerante Estación Ciencia, que funcionó en paralelo al Festival Infantil este fin de semana en el Polideportivo Municipal. En su lugar, la gobernadora envió al Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Jorge Elustondo.

Las razones oficiales por la suspensión de la visita quedaron inscriptas dentro del difuso tìtulo de "problemas de agenda" y "cuestiones personales". En el plano político, las razones eran bien distintas, aunque jamás confesadas.

El problema de la gobernadora fue el temor al rechazo, según indicaron fuentes cercanas a la gobernación a Cuatro Vientos: la posibilidad de sufrir un nuevo escrache o encontronazo con sectores disconformes con las políticas que lleva adelante en el gobierno provincial no se ajusta a los cálculos de una gobernadora que ve su imagen perjudicada por asociación a la del presidente Mauricio Macri, que inició el año con casi el 60% de desaprobación a sus políticas según encuestas realizadas a fines del año pasado.

Sucede que la gobernadora en nuestra ciudad tiene tres focos de conflicto que podrían explotarle en la cara al pisar suelo necochense, algo que no necesita luego del episodio vivido en Mar del Plata con los guardavidas. 

Por un lado, hay una confrontación con los bancarios del Banco Provincia, que se vieron fuertemente afectados por la reforma previsional que impulsó Vidal para los trabajadores de la entidad. La Asociación Bancaria que conduce Sergio Palazzo ha tomado un rol combativo que enfrenta abiertamente las políticas del gobierno nacional y provincial y ha demostrado tener fuerte actividad en la ciudad. Aunque existió el temor cierto de que hubiera alguna clase de movimiento de los bancarios, las negociaciones salariales en curso por lo pronto mantendrían a los bancarios al margen de alguna acción que pudiera entorpecer las conversaciones.

A la vez, el conflicto con los médicos agrupados en CICOP, algo por lo que en realidad responden el municipio y la provincia en conjunto, era otra posibilidad latente dentro de los riesgos de sufrir alguna suerte de confrontación. Altas fuentes municipales confirmaron a Cuatro Vientos que esa posibilidad estaba desactivada con garantías del Ejecutivo.

Una tercera posibilidad, la que más preocupaba al equipo de la gobernadora, era la de los trabajadores del Casino, que han estado muy activos desde que se anunció el cierre del complejo y la posibilidad de ser trasladados a otras dependencias provinciales.

Para este caso, poco podía hacer la Comuna para evitar un conflicto, que pertenece enteramente al gobierno provincial. Los trabajadores del Casino estuvieron presentes en algunas de las últimas sesiones del año pasado en el HCD, visibilizando su problema y tratando de ubicarlo en la agenda de la mano de su referente, Fernando Hansen, quien además de ponerse al frente de los trabajadores fue precandidato a concejal por la lista kirchnerista de Andrea Cáceres en las últimas elecciones.

La imposibilidad de contener los reclamos (sobre todo el de los trabajadores del Casino) hizo que la gobernadora replanteara su agenda postergando una visita que le debe a sus votantes, que en Necochea y Quequén alcanzaron un 57% de los sufragios durante la última elección legislativa.