“Vidal es la primera gobernadora de la historia que no consiguió la reelección”

“Vidal es la primera gobernadora de la historia que no consiguió la reelección”

A seis meses de asumir, el gobernador recibe a Letra P. Su “odio” a la cuarentena, Fernández, CFK, Macri y su archirrival. La deuda y el plan pospandemia.

Por FACUNDO COTTET.

El mate ya está lavado a la tercera cebada. El gobernador Axel Kicillof no lo suelta. “Estamos en pandemia”, bromea. Se ve intomable. Es jueves y hace exactamente seis meses se sentaba en el estrado de la Cámara de Diputados a dar su primer discurso oficial como gobernador. El despacho en La Plata es el mismo que usaba María Eugenia Vidal; las mismas repisas, distintos adornos; los mismos revestimientos de paredes, distintos cuadros. Pintado en óleo, Juan Manuel de Rosas observa desde la pared. Enfrente, el libertador José de San Martín. Durante la pasada gestión, allí colgaban la tapas enmarcadas de los diarios La Nación y Clarín retratando la victoria electoral de Cambiemos 2015. El mobiliario, todo igual: sillones, veladores, mesas y sillas. Antes de recibir a Letra P, Kicillof pasó por Quilmes y Almirante Brown y viajó en helicóptero a Tapalqué. En una hora de charla con este medio, no para de hablar: la salud, la deuda, los impuestos, su gabinete, los bancos, el espionaje, el aislamiento, la oposición; Fernández, CFK, Vidal, Macri, Bullrich, Larroque, Berni… “Odio la cuarentena”, dice. Pondera al Presidente, adelanta su plan para después del coronavirus y señala a la oposición: “Vidal es la primera gobernadora de la historia que no consiguió la reelección”, suelta sobre su principal rival en Buenos Aires.

BIO. 48 años, nacido en la Ciudad de Buenos Aires. Doctor en Economía, docente en distintas universidades.  Casado con Soledad Querehilac, dos hijos. En la facultad de Economía fundó la agrupación TNT (Tontos pero No Tanto) y compartió militancia con Augusto Costa (ministro de Producción) y Javier Rodríguez (Desarrollo Agrario). Ingresó al kirchnerismo de la mano de su amigo Mariano Recalde. En 2013 fue nombrado ministro de Economía de la Nación. CFK lo mandó a recorrer Buenos Aires en 2016. En octubre le ganó la elección a Vidal por 14 puntos de diferencia

-¿Pudo arrancar la reconstrucción que prometió al asumir?

-Asumí con el propósito de reactivar la economía. Parece que tengo prohibido nombrar a quienes gobernaban, pero había recesión, la pobreza estaba al 40%. Uno de cada tres comercios tenía la persiana baja producto del anterior gobierno y sobre esa situación llega la pandemia. Sobre llovido, mojado. Soy un gobernador en modo pandemia, todo el tiempo tomo decisiones relativas a lo que está pasando (…) Soy el primer anticuarentena, odio la cuarentena. Pero si no hubiéramos aplicado el aislamiento tendríamos una catástrofe. Teníamos que remontar una situación y sobre eso construir. Nos dio un tiempo valiosísimo.

-¿Cuál es plan pospandemia?

-Imagino que el mundo pospandemia va a ser un plan de reactivación. Cada medida que se tome tiene que estar inscripta en un plan de mediano y largo plazo; eso sería aprovechar lo más posible una situación tan dramática y complicada. Vamos a eso.

-Puntualmente...

-La cuestión habitacional y una descentralización productiva de la provincia, una mejora en la logística y el uso más conveniente de las cadenas de valor en el territorio.

-¿Cómo está hoy el sistema de salud?

-Duplicamos las camas, hicimos 125 obras, ha tenido una verdadera puesta en valor. Hacer una guardia o hacer un centro de salud en un barrio es una obrita, arreglar un hospital y equiparlo es algo que probablemente no se vea y sea difícil cortar cinta e inaugurarlo. No es exclusivo del último gobierno, pero hubo una tendencia a no hacerlo. Salimos de la pandemia con un sistema de salud más robusto.

DEUDA Y FINANCIAMIENTO

-¿Cómo se financia la provincia, con la recaudación tan baja?

-Tiene asistencia del tesoro nacional. Eso nos está sirviendo para pagar los gastos corrientes más lo adicional por la pandemia. Asumimos con déficit de gastos operativos; eso iba generar un rojo de 125 mil millones de pesos en un año. Había causas muy concretas (…) el traspaso del subsidio del transporte que Macri le adosó a la provincia. La actualización del fondo del conurbano es otro tema que no se hizo durante la administración pasada. Con esa suma de cuestiones se podría alcanzar un equilibrio operativo.

-¿Qué le dice el resto de los gobernadores que también son parte interesada en la coparticipación?

- Buenos Aires aporta el 40% de la producción y tiene el 40% de la población de la argentina. Buena parte de los impuestos van al gobierno nacional pero solo vuelve el 20%. No hay nadie que desconozca que esto es un problema. En la provincia vive el 60% de los argentinos que no llegan a la línea de pobreza. No es difícil de explicar. No sé si es la solución la coparticipación, tal vez pueda ser un programa que afecte a todo el país pero que tenga un peso proporcional en la provincia de Buenos Aires, ya sea para infraestructura faltante, para condiciones sociales, para alimentación; todo eso tiene que tener un eje en la provincia de Buenos Aires. Me parece que así se puede abordar esta inequidad distributiva.

-¿La renegociación de la deuda sigue atada a la estrategia nacional o se avanzó de manera individual?

-La estrategia es la misma. Coinciden temporalmente. No hay que tener un doctorado en Harvard o una silla en el FMI para darse cuenta que, así como están, los vencimientos de deudas son imposibles de abordar. Hubo una propuesta de sustentabilidad porque no están ni los dólares ni los pesos para hacerlo. Se ha hecho una propuesta donde en los primeros años no hay pago y después se empieza a reiniciar el ciclo de pago.

“Macri es el primer presidente y Vidal la primera gobernadora de la historia de la democracia que no consiguieron la reelección. Lo buscaron y trabajaron para eso.”

-¿Cómo es el diálogo con los acreedores?

-Las propuestas que han llegado, no formalmente, están bastante conectadas con la situación real. Al principio decían “te doy un descuento del 10% y pagame igual”. Eso es una situación de incomprensión absoluta. La reducción tiene que ser importante y el cambio de plazo tiene que ser importante, eso está comprendido. Los acreedores están comprometidos, han comprendido mejor cuál es la situación real.

-Fue muy compleja la negociación por la ley impositiva ¿Espera que la oposición acompañe el proyecto para subir Ingresos Brutos a los bancos?

-Es una pena que la oposición haya resuelto defender intereses de sectores que no son los que más necesitan. Los sectores que han podido atravesar la pandemia en una mejor condición tendrían que contribuir. De hecho muchos lo hacen. En la provincia recibimos muchísimas donaciones del sector privado. Me parece bien que lo discuta el parlamento (…) que sectores más favorecidos aporten un poco más durante la pandemia, porque el gasto se ve por todos lados.

“Estoy seguro que no me espía el Estado. Seguramente que un hacker pueda leerte los mails. Una cosa es que lo haga un particular y otra que lo haga el Estado. Sé que no me espían".

-¿Se acostumbró a tener custodia?

-El cuerpo de custodio de la gobernación que tengo es de la policía. Gente humanamente impecable, guardan un trato que corresponde, es gente valiosa y macanudísima. La gobernadora anterior había traído policía de la Ciudad de Buenos Aires.

-¿Está conforme con el rol protagónico de Sergio Berni?

-Sergio Berni hace un trabajo inmenso y como tiene grado militar es jefe y forma parte de los operativos. No me acuerdo el nombre de algún ministro del gobierno anterior, pero debe ser una falla mía. Todos saben quién es el “Cuervo” Larroque, Daniel Gollan o Sergio Berni. Estoy muy tranquilo porque trabajan en conjunto. Hay áreas más espectaculares y televisivas. (N. de la R: la entrevista se realizó previamente a las fuertes declaraciones del titular de Seguridad bonaerense contra su par de Nación, Sabina Frederic)

-¿Quiénes trabajan en silencio?

-Teresa García (Gobierno), que habla todos los días con 135 intendentes; tal vez no da para un flash televisivo, pero hemos trabajado día y noche sin parar. Agustina Vila (Educación) mantuvo la continuidad pedagógica durante la pandemia. Repartimos 5 millones de cuadernillos, son hechos invisibles pero centrales. Agusto Costa (Poroducción) tiene a cargo cultura y turismo. Hubo programas de asistencias a la cultura y se trabajó con el sector de turismo para que consigan los ATP para el pago de los sueldos. Tengo miedo que se nos funda el motor. Estamos teniendo muchísima exigencia y aprovecho para agradecer el compromiso en estos seis meses de gobierno. Han dejado parte de la vida acá. Veníamos de un gobierno donde no había mucho sostenimiento del Estado en sus capacidades. Hemos puesto a funcionar la Radio Provincia y hemos lanzado en pandemia una programación nueva de primer nivel.

-¿A Larroque lo eligió porque la gestión no tenía territorialidad?

-Es un hombre perfecto para el área. La gestión anterior delegaba todo en Nación. Había que seguir el camino que inició Fernanda Raverta. Andrés tiene una capacidad inmensa de trabajo. Conoce a todos los actores de la provincia, tanto de la política como de los movimientos sociales. Esto no es tirar plata, es invertir en el desarrollo de la comunidad y ver cómo se puede hacer para transformarle la vida a la gente. Estoy tremendamente conforme en que sea Larroque.

-Creó el ministerio de Mujeres, Política de Género y Diversidad Sexual, ¿coincide en que la toma de decisiones políticas sigue habiendo una fuerte injerencia masculina?

-El ministerio de Mujeres nos agarra un poco a traspié, tuvimos que mandar la gente a la casa. Pero lo que está haciendo Estela Díaz, como nuestra subsecretaria de salud mental, Julieta Calmels, es importante. La tarea más importante y no tan visible en la que contribuye Estela es impregnar una mirada no machista a todas las áreas de gobierno.

LA OPOSICIÓN

-¿Macri es el peor presidente desde el retorno de la democracia, como dijo el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero?

-Por ahí anda. Es el primer presidente y Vidal la primera gobernadora de la historia de la democracia que no consiguieron la reelección. Buscándolo y pudiendo hacerlo.

-¿Los intendentes de la oposición politizan los reclamos por la apertura de la cuarentena?

-Hubo una especie de ola anticuarentena. No sé cuánto de orquestada estaba, no quiero ser conspirativo, pero fue simultánea. Hubo un intento de generar una corriente de opinión que fracasó. Justo hubo una coincidencia de los intendentes del PRO. Del radicalismo no lo he visto demasiado. Escucho a los intendentes del PRO, los entiendo; después de escucharlos vengo y hablo con el comité de científicos y el comité de expertos. Hay que informarse bien y no politizar. Cuando fue la coincidencia de que justo un grupo político salió con eso, hubo una teleconferencia de la exgobernadora diciendo algo de los votos…

-Salió a pedir caminar para la elección 2021.

-Sí, pero no polemicé, ni lo voy a hacer. Yo distribuyo recursos a los intendentes. Sino no hubieran podido pagar los sueldos. Nunca lo cobré políticamente, ni me interesa hacerlo. Uno de los que más recursos recibió fue Mar del Plata, por su situación financiera previa, no es un tema del intendente Montenegro.

-¿Dónde la ve a Vidal?

-Tiene que definir qué papel quiere desempeñar. Hizo una trayectoria política que tuvo esta dificultad que fue no conseguir su reelección y ahora tiene que redefinir su lugar político para poder evaluarla.

-¿Habla con ella?

No, últimamente no. Nos intercambiamos Whatsapp al principio de la pandemia y expresó su voluntad de colaborar. Yo estoy colaborando con la oposición y con los que tienen papel institucional, estamos trabajando con Juntos por el Cambio.

-Avanza la causa por supuesto espionaje del Estado, también por escuchas de Asuntos Internos de la Bonaerense… ¿Cree que es espiado?

-No lo sé, pero estoy seguro que no me espía el Estado. Seguramente un hacker pueda leerte los mails. Yo lo que escribo lo hago por whatsapp y estos sistemas no son confiables. Una cosa es que lo haga un particular y otra, que lo haga el Estado, por la gravedad institucional que tiene. Sé que el Estado no me espía.

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