La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, visitó este martes La Matanza por segunda vez en una semana y nuevamente omitió invitar a su recorrida a la intendenta local, la peronista Verónica Magario, confirmaron a LPO desde el entorno de ambas dirigentes.

"No hubo invitación, ni llamado, ni saludo. No hubo aviso", aseguraron a este medio desde el entorno de Magario, mientras que fuentes ligadas a la gobernadora explicaron que se trató de la visita a una cooperativa y "no de una visita política", por lo que sugirieron que no existían motivos para invitarla a la actividad.

Vidal se mostró este martes con Stanley, luego de que comenzara a trascender que Durán Barba quiere a una mujer con perfil similar a la Gobernadora para que compita en la Provincia, la elección más relevante de octubre.

En La Matanza aseguran que la última vez que hubo un diálogo entre ambas fue en marzo del año pasado. "Sólo hablaron cuando se reunieron en La Plata y de eso hace ya más de un año", recordaron y detallaron que Magario le solicitó a Vidal "como 20 reuniones" pero la gobernadora "no le atiende el teléfono".

En la Provincia lo desmintieron al indicar que "el equipo" de Vidal está "a disposición" de Magario, aunque reconocieron que la agenda de la gobernadora es "intensa" y que hay intendentes a los que todavía no les concedió un mano a mano, por lo que no puede destinar todo su tiempo a la matancera. En rigor, informan que se reunió "con 120 de los 135 intendentes" y destacan que en ese número está Magario, a quien "ya recibió".

La gobernadora y la matancera mantienen una relación tensa desde el inicio de sus respectivas gestiones. En La Matanza aún recuerdan el "desastroso episodio" en un acto de Manaos, cuando Mauricio Macri y Vidal le "prohibieron" a Magario subir al escenario.  

En cuanto a la visita de este martes, fuentes allegadas a Vidal explicaron en que fue un evento "despolitizado" e insistieron en que "se trató de una actividad social, no política". En ese sentido, resaltaron que quien sí estuvo presente fue la ministra de Desarrollo nacional, Carolina Stanley.

El dato tiene una particularidad: Vidal se mostró con Stanley en La Matanza, el bastión peronista del Conurbano, luego de que -como anticipó LPO- comenzara a trascender que Jaime Durán Barba quiere a una mujer con perfil similar a la gobernadora para competir en la provincia de Buenos Aires, la elección más relevante de octubre.   

Stanley es la nueva opción que barajan en la cúpula del macrismo, luego que perdiera fuerza la instalación de un candidato joven y poco conocido como el intendente de Pinamar, Martín Yeza.   

El nombre de la ministra comenzó a circular con insistencia. Es que la funcionaria es capaz de crear una figura de madre joven, de dirigente con gestión y sensibilidad social, similar a la de Vidal, que logró cautivar a los bonaerenses en 2015. 

Es ademas acaso una de las funcionarias más cercana a ala gobernadora, a quien secundó en la Ciudad. Suele compartir además, actividades con la primera dama, Juliana Awada. 

Así como el incremento de visitas del presidente Mauricio Macri al Conurbano no es casual, tampoco lo son las frecuentes visitas de Vidal a La Matanza y el hecho de que decida ser acompañada por la ministra de Desarrollo. Además, con su visita de este martes a una cooperativa es la segunda vez que la gobernadora pisa esa localidad en una semana, después del "timbreo" que realizó el último martes.

El problema con Stanley -confirmaron a LPO fuentes del macrismo- es que no tiene domicilio en la provincia de Buenos Aires y habría que navegar en la justicia para presentarla. La otra mujer anotada como candidata es Gladys González, presidente de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar).