El vicegobernador asumirá mañana

Weretilneck fue intendente de Cipolletti y desde allí selló acuerdos con la UCR y el PJ de Soria
Alberto Weretilneck desde hacía un par de años quería ser gobernador por el Frente Grande, pero nunca imaginó que le tocaría vivir esa circunstancia tras la muerte de Carlos Soria, a quien a comienzos de 2011 decidió acompañar en la fórmula por la gobernación, dejando a un lado su aspiración personal.

Mañana, Weretilneck asumirá la gobernación de Río Negro hasta 2015 tras el fallecimiento inesperado del gobernador a 21 días de haber asumido el mandato.

Con 49 años y sin título universitario en su haber, Weretilneck se muestra como un hombre sereno pero con una fuerte personalidad y decisión, que lo llevaron durante su gestión como intendente de Cipolletti a encabezar una "lucha contra el narcotráfico" con un modelo de seguridad ciudadana que intentará ahora replicar en toda la provincia.

Se inició en la vida política en 1983 con el retorno de la democracia militando en el Partido Intransigente y en la última década se sumó al Frente Grande, fuerza de la cual fue recientemente designado vicepresidente a nivel nacional y presidente en la provincia de Río Negro.

En Cipolletti llegó a cargos institucionales de la mano del ex intendente y ex diputado nacional Julio Arriaga, de quien rápidamente se convirtió en su hombre de confianza y lo apadrinó para sucederlo en 2003, cuando ganó su primera intendencia, que repitió con un amplio respaldo popular en 2007.

Se hizo conocer en la provincia mediante una prolija campaña electoral 2.0 utilizando las nuevas tecnologías y redes sociales para instalar su figura, que logró obtener una buena imagen.

El vicegobernador rionegrino que se hará cargo mañana del Poder Ejecutivo provincial es reconocido como un hombre fuerte en la política local con una gestión municipal exitosa que lo llevó a tener propuestas de alianzas y acercamientos con la UCR, que gobernó Río Negro durante los últimos 28 años, y en el último año plasmó una sólida vinculación con el Partido Justicialista.

Al sumarse a la fórmula gubernamental del FpV, Weretilnek dijo que se trataba de un "acuerdo personal" con Soria, a quien consideraba un "amigo" de la política con quien compartía un modelo de provincia que plasmaron en propuestas para lograr la gobernación, que asumieron 21 días atrás.

El nuevo gobernador de Río Negro se muestra cercano al kirchnerismo y desde un comienzo respaldó al gobierno que encabeza Cristina Kirchner, considerado incluso como un dirigente con mejor vínculo con el gobierno nacional que el que tenía Soria, quien hasta hace pocos meses renegó del matrimonio presidencial y había tenido un fuerte cruce años atrás cuando encabezaba la SIDE en el gobierno de Eduardo Duhalde. Fuentes de la Casa Rosada aseguraron que Weretilneck incluso tenía un mejor trato personal con la Presidenta y con sectores juveniles del kirchnerismo.

En la nueva etapa institucional de Río Negro, el ex intendente de Cipolletti ejercerá el cargo de mayor relevancia en la provincia con una minoría de dirigentes que le son propios en la Legislatura y ante una predominancia del justicialismo en todas las áreas. Su acercamiento a la Casa Rosada y los gestos de apoyo que brindó la Presidenta en las últimas horas serán cruciales para llevar adelante una gobernación que nunca pensó que iba a alcanzar tan rápidamente.

Alberto Weretilneck desde hacía un par de años quería ser gobernador por el Frente Grande, pero nunca imaginó que le tocaría vivir esa circunstancia tras la muerte de Carlos Soria, a quien a comienzos de 2011 decidió acompañar en la fórmula por la gobernación, dejando a un lado su aspiración personal.

Mañana, Weretilneck asumirá la gobernación de Río Negro hasta 2015 tras el fallecimiento inesperado del gobernador a 21 días de haber asumido el mandato.

Con 49 años y sin título universitario en su haber, Weretilneck se muestra como un hombre sereno pero con una fuerte personalidad y decisión, que lo llevaron durante su gestión como intendente de Cipolletti a encabezar una "lucha contra el narcotráfico" con un modelo de seguridad ciudadana que intentará ahora replicar en toda la provincia.

Se inició en la vida política en 1983 con el retorno de la democracia militando en el Partido Intransigente y en la última década se sumó al Frente Grande, fuerza de la cual fue recientemente designado vicepresidente a nivel nacional y presidente en la provincia de Río Negro.

En Cipolletti llegó a cargos institucionales de la mano del ex intendente y ex diputado nacional Julio Arriaga, de quien rápidamente se convirtió en su hombre de confianza y lo apadrinó para sucederlo en 2003, cuando ganó su primera intendencia, que repitió con un amplio respaldo popular en 2007.

Se hizo conocer en la provincia mediante una prolija campaña electoral 2.0 utilizando las nuevas tecnologías y redes sociales para instalar su figura, que logró obtener una buena imagen.

El vicegobernador rionegrino que se hará cargo mañana del Poder Ejecutivo provincial es reconocido como un hombre fuerte en la política local con una gestión municipal exitosa que lo llevó a tener propuestas de alianzas y acercamientos con la UCR, que gobernó Río Negro durante los últimos 28 años, y en el último año plasmó una sólida vinculación con el Partido Justicialista.

Al sumarse a la fórmula gubernamental del FpV, Weretilnek dijo que se trataba de un "acuerdo personal" con Soria, a quien consideraba un "amigo" de la política con quien compartía un modelo de provincia que plasmaron en propuestas para lograr la gobernación, que asumieron 21 días atrás.

El nuevo gobernador de Río Negro se muestra cercano al kirchnerismo y desde un comienzo respaldó al gobierno que encabeza Cristina Kirchner, considerado incluso como un dirigente con mejor vínculo con el gobierno nacional que el que tenía Soria, quien hasta hace pocos meses renegó del matrimonio presidencial y había tenido un fuerte cruce años atrás cuando encabezaba la SIDE en el gobierno de Eduardo Duhalde.

Fuentes de la Casa Rosada aseguraron que Weretilneck incluso tenía un mejor trato personal con la Presidenta y con sectores juveniles del kirchnerismo que el que supo cultivar Soria.

Comentá la nota