Vecinos denuncian que ninguna de las distribuidoras quieren vender gas social

Vecinos denuncian que ninguna de las distribuidoras quieren vender gas social
La mayoría de la gente no sabía que en esta ciudad hay tres distribuidoras de gas social. Aseguran que van a las tres de la mañana a sacar turno, donde solo se les entrega 50 números y los que hacen fila son entre 100 a 150 personas.

Lo llamativo es que observan como del lugar salen camionetas cargadas de garrafas que trasladan a distintos comercios para comercializarlas a altos precios y piden explicaciones para tener en claro cuántas garrafas sociales les envía la provincia.

Desde las 5 de la mañana, una anciana de 62 años esperaba frente a la represa de la terminal de ómnibus de esta ciudad, al camión que traía unas mil garrafas correspondientes al gas social. Pero la persona mayor no era la única que se encontraba en el lugar, ya que otras 30 personas, hacían lo mismo, pero desde un poco más temprano.

Primera Línea aprovechó la oportunidad de que este operativo prácticamente se estaba realizando frente a la redacción, de charlar con la gente y escuchar varias quejas, que iban desde problemas menores como el lugar donde se iba a instalar el camión y la fecha misma en la que arribaría el camión, ya que fue modificada, hasta asegurar que comerciantes de la ciudad compran por 16 pesos y luego las venden a 50.

En cuanto a esto último, lo que más llamó la atención fue el reclamo generalizado del supuesto aprovechamiento que hay de las distribuidoras que estarían vendiendo el gas social, que hoy cuesta 16 pesos, a comerciantes de la ciudad, sobretodo a negocios denominados “chicos”, que se acercan con sus vehículos y se llevan unas 15 a 20 garrafas cada uno.

“Yo me fui a las tres de la mañana a sacar número y había unas 100 personas en la fila. Cerca de las 6 de la mañana salieron y dieron solo 60 números. Quedó mucha gente sin poder retirar la garrafa y nos dijeron que solo esa cantidad le envió la provincia”, dijo un joven de apellido Escalante.

Cuando esta persona fue consultada si sabía que en esta ciudad existen tres lugares donde poder adquirir la garrafa social, el mismo señaló: “No. solo sabía que acá en Total-Gas se podía comprar”. Al joven se le hizo saber que también se puede conseguir en Amarilla Gas y Ruvira Gas. Detalles como este, no lo sabían la mayoría.

Otra de las quejas que se escuchó de la gente es que alguien tiró el dato de que las garrafas del gas social serían paraguayas, no poseen los diez kilogramos y el gas es de muy baja calidad ya que cuando se usa, la llama en la hornalla es de color rojizo y se nota que le queda demasiado líquido cuando se acaba el gas.

“Tenemos serios problemas con los tubos de esas garrafas, ya que cuando se termina el gas, vamos a los negocios a comprar, y no nos reciben porque el comerciante nos dicen que esas garrafas son paraguayas y el tubo no es confiable. Entonces solo tenemos que esperar que el operativo pueda estar otra vez en esta ciudad”, indicó Hugo, quien aseguró que tuvo que pintar la garrafa para que una empresa la pueda recibir. “Las negras, las grises y las coloradas, los comercios no las reciben”, sostuvo.

Pero no todo terminó ahí. También la gente reclamó: “En los negocios de los barrios esas mismas garrafas que ayer estaban comprando por 16 pesos, las tenemos que comprar a 50 pesos, lo que me parece es un disparate”, indicaron.

Los comerciantes argumentan gastos de traslado.

Aunque los comerciantes argumentarían la venta con sobreprecio de las garrafas sociales en el gasto que les supone el traslado de estos envases desde las distribuidoras a sus locales, el secretario de Comercio Interior, Ricardo Marimón, había señalado: “No es admisible que ese costo lo paguen los vecinos, cuando el monto de ese recurso lo prefijó el Gobierno nacional, que es quien subvenciona la garrafa”.

La advertencia del funcionario fue formulada ante las diversas denuncias que radicaron en los últimos días los habitantes de la zona sur y de los barrios Matadero y Mitre y Néstor Kirchner. Según los vecinos, en esos sectores, a las de 10 kilos de gas envasado se los está comercializando a casi $ 50, es decir, a $ 36 más de lo que se estableció como precio estándar para su venta.

“Pese a no ser un órgano de contralor, tenemos la obligación de hacer saber a la gente y a los funcionarios municipales que en Sáenz Peña se están comercializando con sobreprecios las garrafas sociales, que son las que utilizan las personas que menos tienen. Es una situación que debe resolverse, porque estamos hablando de que pagan un monto muy distinto al fijado por el Gobierno”, expresó Marimón en la oportunidad de su visita a esta ciudad.

De todos modos, los vecinos no entienden el accionar de los propietarios de almacenes, kioscos, supermercados y demás rubros que comercializan este recurso. “Sabemos cuál es el rol del comerciante y también los hemos escuchado. Ellos dicen que tienen que amortizar el gasto que les supone el traslado de las garrafas desde las empresas distribuidoras a sus locales. Pero si nosotros vamos a buscar de las distribuidoras, no nos cuesta nada. Entonces no sé por qué ellos dicen que les genera gastos. Para mí lo hacen de puro estafadores”, indicó Escalante, en charla con el Diario Primera Línea.

Lo que propusieron los vecinos es que “trate de impulsar una fuerte campaña de difusión y concientización. Por un lado, que nos recuerden a todos los vecinos que el valor de la garrafa es de $ 16, y por otro lado, apelamos a la concientización de los comerciantes respecto a que ese gas envasado está subsidiado”, explicaron.

“Recordemos que desde hace un tiempo desde la Secretaría de Comercio Interior se viene pidiendo a los vecinos que denuncien ante la Oficina de Defensa al Consumidor que está ubicada en calle 10 y 15, y que luego se remitirá estos antecedentes al Municipio y a la Provincia, que es la que se encarga de fiscalizar y controlar el respecto del monto de comercialización prefijado”, indicó, no sin antes destacar que el sobreprecio lo están pagando “las personas que menos tienen, porque son las que consumen este tipo de recurso”.

Es el anexo IV de la resolución 1071/08 de la Secretaría de Energía de la Nación, la que establece los precios máximos en los que deben venderse las garrafas. Así que la de 10 kilos no puede costar más de $ 16; la de 12, $ 20 y la de 15, $ 25. Además, se indica que todos los comercios deben exhibir los valores de estos productos.

Pero todos estos puntos, para muchos vecinos no están claros, para los que les toca distribuir como tampoco los comerciantes, que llenan sus arcas sin interesarle el bolsillo de la gente.

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